La cuerda estirada de Markovic

26, 20, 16, 14 y 9. Es la descendente secuencia de minutos en pista de Stefan Markovic en los últimos cinco encuentros disputados por el Unicaja. No es ningún secreto que los dolores en el dedo meñique de su pie izquierdo le han obligado a racionalizar hasta lo mínimo posible los entrenamientos y a pincharse periódicamente para aliviar el dolor.

La cirugía es una opción que ya Plaza ha dejado caer en alguna ocasión. El propio jugador está comprometido, insiste en tirar hacia delante y seguir trabajando y jugando, pero su lenguaje corporal en los últimos partidos denota que no está cómodo en pista y no es casualidad que Plaza haya reducido su minutaje.

El quirófano implicaría más de un mes de ausencia. El reposo, de momento, no alivia el dolor aunque la opinión de los médicos es que la lesión no empeora pero sí estará ahí, con épocas de más o menos intensidad en las molestias según se fuerce. El asunto preocupa en el Unicaja. Que Granger no esté en su mejor momento, también quizá por haber forzado con molestias musculares, complica también el equilibrio físico y táctico en el puzle de Plaza. Markovic sigue con su plan de trabajo y, en principio, también será de la partido mañana ante el Fuenlabrada.