El jugador franquicia

Cuenta en un peculiar español que fue un tío suyo el que le puso el apodo de Duda porque su juego le recordaba al de un centrocampista del Oporto que se llamaba así. En su segunda etapa en el Málaga, Sergio Valente Barbosa, Duda, vuelve a disfrutar del fútbol. Sus números, máximo goleador (3) y máximo asistente (2), aquí igualado con Eliseu, refrendan que el portugués es el jugador franquicia del equipo. Es más, con el tanto que le marcó al Barça, el luso se ha convertido con 16 dianas en el sexto máximo goleador del Málaga CF en Primera, sólo por detrás de Dely Valdés (38), Darío Silva (36), Catanha (24), Salva (24) y Musampa (22).

Más allá de los números, de sus palabras se deduce que vuelve a sentirse un jugador importante. Parece obvio que su juego se ha visto implementado en estas jornadas hasta el punto de convertirse en una de las piedras angulares de Tapia. De hecho, fue el propio técnico de Baena el que le localizó este verano para acelerar su cesión. Por ello, sus primeras palabras de elogio están dirigidas al técnico de Baena: "Antonio nos conoce a la perfección y es un técnico que saca el cien por cien de los jugadores".

A pesar de su gran inicio de temporada, refrendado por el golazo que le marcó a Víctor Valdés, Duda rehúsa monopolizar los méritos del equipo: "Me siento uno más en la plantilla. El grupo está fuerte y esperamos conseguir los objetivos que nos marcamos al inicio de la temporada, que no es otro que la permanencia y llegar a los 42 ó 43 puntos. Está claro que vengo de un equipo como el Sevilla en el que todos jugábamos veinte partidos por temporada por el nivel que había en la plantilla y que no gocé de continuidad, pero mi etapa en Sevilla ha sido muy positiva".

Aunque no guarda ningún "rencor" de su anterior etapa, en la que llegó a estar apartado del equipo por no aceptar irse traspasado a la Real Sociedad, asegura que el tiempo "ha puesto a cada uno en su sitio". De hecho, su relación con la grada, que le recibió este verano con algunos silbidos, ha cambiado sustancialmente y el sábado abandonó La Rosaleda en medio de una gran ovación: "Desde el primer día siempre me han exigido y ahora es peor todavía porque fallas un pase y ya te están pitando. Son cosas del fútbol, pero siempre he disfrutado del fútbol y en esta nueva etapa aún más. Además, le hemos callado la boca a mucha gente después de las críticas que nos cayeron".

Para el portugués, el equipo, a pesar de la derrota ante el Barça, va dibujando una línea ascendente en su juego: "Se demostró que ellos tienen una gran calidad y que en cuatro oportunidades te meten cuatro goles, pero nosotros siempre dimos la cara". Ante la inminente visita al Santiago Bernabeú, Duda, que ganó en ese estadio con la camiseta del Sevilla, dio las claves para vencer a los de Schuster: "Sobre todo, creérselo y aprovechar las escasas oportunidades de gol que tengamos".

Su buen momento de forma hace que no descarte volver a la selección portuguesa: "¿Por qué no? Sería todo un premio".