Por primera vez en la última década no habrá equipo del Clínicas Rincón en la Liga LEB. Después de reconstruirse en varias ocasiones, en Plata o en Oro, se ha roto la cadena. Se dan varias circunstancias para el hecho. Recorte de gastos en el Unicaja, el hecho de que el esqueleto del equipo del año pasado, se estima en Los Guindos, debe volar por separado fuera para demostrar su valía y el excesivo gasto de salir en solitario. Así que, como declaró Manolo Rincón en la Cope el pasado jueves, la idea es que el Clínicas patrocine a la cantera del Unicaja, que en todos los campeonatos regionales y nacionales la próxima temporada llevaría el apellido del Clínicas Rincón.

Ayer hubo un encuentro en Los Guindos para dejar pactado el acuerdo, ratificado a falta de firma. El equipo filial será el junior, que competirá en Liga EBA, con el posible refuerzo de algunos jugadores ya seniors que en el club se estime que aún son interesantes. En el Unicaja se piensa que a los Karahodzic, Solaude o Belemene les queda corto otro año en la LEB Plata y a la generación que viene aún le queda largo competir en esa categoría. Así que se opta por una vía intermedia, revisable cuando las generaciones que vienen vayan madurando. Por ejemplo, la cadete y la infantil actuales tienen un puñado de internacionales en sus filas. El hecho de que se haya reducido la apuesta por los jugadores foráneos para reducir costes y privilegiar el producto local también ha mermado algo la profundidad de talento en Los Guindos. También queda por definir los diferentes cuerpos técnicos. Paco Aurioles fue el técnico del Clínicas y su segundo, Chiki Gil, lo fue del junior.

El Unicaja baraja diferentes opciones para ceder a los que considera futuribles del primer equipo, básicamente Karahodzic, Romaric y Uta. Hay algo menos de fe en Soluade, al que se puede rescindir el vínculo.