Sanidad

El Congreso vota la regulación del cannabis medicinal

  • La subcomisión encargada de analizar este uso presenta el informe final de conclusiones.

Cultivo de cannabis en Pergamino (Argentina)

Cultivo de cannabis en Pergamino (Argentina) / Pampa Hemp (Efe)

La subcomisión sobre cannabis medicinal del Congreso de los Diputados tiene previsto votar este martes el informe final de conclusiones para regular el uso terapéutico de esta sustancia que apoyan, con algunos matices, los partidos del Gobierno de coalición y sus socios y rechazan el PP y Vox.

De las conclusiones que los distintos partidos presentaron el pasado 9 de junio tras escuchar a los cientos de expertos que han comparecido desde febrero, se extrae que PSOE, Unidas Podemos, ERC, PNV y EH Bildu y Ciudadanos apoyan ampliar un uso más generalizado de medicamentos derivados del cannabis, mientras que PP y Vox aluden a la falta de evidencia para oponerse.

Así, el PSOE aboga por garantizar la disponibilidad de medicamentos derivados de cannabis para su uso terapéutico y explorar fórmulas que permitan la disponibilidad en el mercado farmacéutico de extractos o preparados estandarizados de esta sustancia que actualmente no tienen autorización para su venta.

Una regulación que ven con buenos ojos tanto ERC como el PNV o EH Bildu, aunque han planteado enmiendas, sobre todo para llevar más allá de las farmacias hospitalarias la dispensación del cannabis y permitir el acceso desde las comunitarias, una cuestión a la que no hace referencia Unidas Podemos en sus recomendaciones.

De hecho, el socio minoritario del Gobierno dice que la prescripción la han de realizar profesionales sanitarios, sin especificar cuáles, al tiempo que, sin hablar directamente de la regulación del uso recreativo, sí que plantea "tomar medidas que flexibilicen el acceso al cannabis en detrimento de las mafias y redes criminales" y luchar contra la estigmatización de los consumidores.

Además, apuesta por "impulsar una industria pública que pueda garantizar la investigación (sobre el cannabis) de manera neutra y garantizar un suministro mínimo estable y constante".

Cs, por su parte, aspira a que el cannabis medicinal pueda ofrecerse en cualquier farmacia con receta, y no sólo se distribuya en las farmacias hospitalarias como plantea el PSOE, además de apuntar a una posible liberalización de su uso recreativo.

El PNV está de acuerdo en términos generales con la propuesta de los socialistas porque "supone un paso de gigante", pero pide ampliar el acceso, la prescripción y la distribución de estos preparados de cannabis y establecer un calendario temporal determinado para desarrollar la normativa correspondiente.

De esta forma, quiere que los preparados de cannabis medicinal se prescriban también por profesionales de atención primaria de ambulatorios y centros de salud, que se puedan ampliar sus indicaciones a otros perceptores, teniendo como referencia las recogidas en las listas aprobadas en otros países de la UE, tales como las dolencias crónicas por dolor neuropático y oncológico.

Y, en la misma línea que Cs, reclama que se pueda acceder a ellas a través del mercado farmacéutico comunitario, y no solo el hospitalario, como recoge el documento inicial.

EH Bildu apoya también la regulación del uso terapéutico y pide entre otras cuestiones favorecer el autocultivo para pacientes con receta que opten por esta vía de acceso, y propone del mismo modo crear la Agencia del Cannabis, que sería la encargada de controlar el uso de este producto.

Mientras que ERC quiere que se regularice "en todos sus usos" y se pueda dispensar también en las farmacias no solo los extractos, sino también la flor medicinal.

Por el contrario, el PP pide dejar en manos de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) la regulación y plantea extremar el cuidado para que esa posible autorización médica no derive en una mayor disponibilidad y consumo general de la sustancia.

Los populares entienden que no debe ser el Parlamento sino la agencia reguladora la que se pronuncie sobre el uso del cannabis: "Entre el prohibicionismo y la liberalización, (planteamos) la regulación basada en la experiencia pero con investigación de calidad y con avales de seguridad y eficacia", expone el PP en sus conclusiones.

También sugiere, "en base a la evidencia científica, identificar procesos asistenciales en los que puedan autorizar el uso del medicamento, estableciendo posteriormente vías y lugares de dispensación".

El PP pretende que se elabore en el seno del Ministerio de Sanidad un libro blanco sobre el uso medicinal del cannabis en España "desde el rigor y la evidencia científica con aportaciones de organismos del ámbito asistencial, de la investigación, sociedades científicas, asociaciones de pacientes".

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