La presidenta del PP catalán, Alícia Sánchez-Camacho, asegura que su partido "no está en condiciones de apoyar ni de plantearse ninguna colaboración estable con la nueva CiU de Artur Mas", a la que ve preocupada por sus "delirios independentistas".

En una entrevista concedida a Efe, la líder del PP catalán afirma que la participación del presidente de la Generalitat, Artur Mas, en la consulta independentista de Barcelona del pasado 10 de abril marcó "un antes y un después" en la relación de su partido con el Govern de CiU.

Sánchez-Camacho cree que en estos primeros meses de gobierno Artur Mas ha demostrado que su objetivo es liderar Cataluña en la "transición hacia la independencia". "Está poniendo -apunta- en riesgo la convivencia y la cohesión social de todos los catalanes", afirma en alusión a su apuesta por la vía soberanista.

Aunque los populares no han cerrado la puerta a respaldar los presupuestos de la Generalitat, Sánchez-Camacho considera que es "muy difícil" el entendimiento con la CiU actual. Por ello, la líder del PPC concluye: "No queremos de compañero de viaje a un president que da prioridad a la agenda separatista".

Al votar en la consulta por la independencia de Cataluña que se celebró en Barcelona, el PPC considera que Mas dejó de ser el presidente de todos los catalanes para representar "a una minoría independentista".

Preguntado por si contaría con CiU en el caso de que líder del PP, Mariano Rajoy, venciera en las elecciones generales pero sin mayoría absoluta, ha respondido: "Espero que no tenga que ser un aliado necesario".

Y es que, a juicio de Sánchez-Camacho, Artur Mas es un "lobo con piel de cordero" que lidera un Govern "de mediocres" que, de momento, se caracteriza por sus "improvisaciones y despropósitos".

Por otra parte, la dirigente popular considera "muy decepcionante" la apuesta del expresident Jordi Pujol por la vía independentista como única alternativa a la situación actual de Cataluña.