El director mexicano Carlos Cuarón presentó este sábado en la Sección Oficial a concurso del Festival de Málaga la película Amalgama, una “comedia de dolor” que reivindica la figura de los dentistas. Está protagonizada por Stephanie Cayo, Miguel Rodarte, Tony Dalton y Manolo Cardona.

El filme cuenta la historia de cuatro dentistas, tres hombres y una mujer, que se encuentran en un congreso en la Riviera Maya. Los tres hombres desean a la mujer, pero ella tiene algo más en mente. Todos huyen de su propia historia de dolor. Y pasan juntos un enloquecido fin de semana de celos, envidia y excesos en una minúscula isla del Caribe que marcará sus vidas para siempre.

Parte del equipo de la película participó en la presentación del largometraje. En el acto abordaron el contenido y trasfondo de la película el director Carlos Cuarón, la actriz y productora Stephanie Cayo, y los actores Miguel Rodarte y Tony Dalton. Todos ellos describieron como un largometraje sobre el dolor, centrado en un encierro entre cuatro amigos dentistas en una casa en una isla paradisíaca de la Riviera Maya. Ese encierro genera una tensión emocional entre los protagonistas que tienen que “superar sus egos” y luchar contra sus debilidades y problemas.

"Es una pieza muy teatral, aunque en el cine es más fácil enriquecer el contexto”, afirmó Carlos Cuarón

El director destacó que en estos tiempos de pandemia Amalgama cobra especial importancia porque “todos hemos vivido situaciones de encierros y confinamientos”. Sobre el origen de la película, Cuarón señaló que el título se le ocurrió tan pronto como supo que la historia iba a estar protagonizada por dentistas. La elección del nombre responde al significado de la amalgama, un material de restauración de dientes afectados por caries. Un título “orgánico” para la película por toda la variedad de conflictos y de identidad moral de cada personaje. “Escogí esta profesión para los protagonistas porque tendemos a asociar a los dentistas con el dolor, y la obra habla principalmente de dolor”, indicó el mexicano.

La película contiene toques cómicos que vienen justificados en el discurso narrativo por la intención de retratar “el absurdo de la condición humana”, explicó Cuarón, quien reflexionó sobre la gran cantidad de contenido teatral que se observa en la película: “Desde el principio me di cuenta de que era una pieza muy teatral. Con el cine, el contexto se enriquece más fácilmente que en el teatro”. El director mostró su deseo de llevar en un futuro Amalgama a la puesta en escena: “Ojalá presentarla aquí en el Teatro Cervantes y con el mismo reparto”.

Sobre el trabajo actoral, Stephanie Cayo destacó el ambiente “cercano” y “próximo” entre los actores para tratar y profundizar en los personajes. “En las primeras semanas, tuvimos charlas y conversaciones en las que todos opinábamos de cada personaje”, señaló la actriz y productora. Cuarón añadió que el proceso de trabajo consistió en “dividir en dos parejas a los actores y después unir a los cuatro para comprobar las dinámicas”.