Un Festival de Málaga entre el órdago y la prudencia
Festival de Málaga
El certamen mantiene todos los protocolos de seguridad incorporados el año pasado y vuelve a prescindir de la alfombra roja
La sección oficial presenta 23 películas de cineastas como Agustí Villaronga, Óscar Aibar, Javier Fesser, Ainhoa Rodríguez y los malagueños Ezekiel Montes y Macarena Astorga
Málaga/Como un puente entre la prudencia y la celebración mayor del cine como acontecimiento no sólo cultural, sino de ciudad, se presenta la 24 edición del Festival de Málaga, que se celebrará del 3 al 13 de junio en una remesa ampliada a diez días y cuyos contenidos quedaron definitivamente revelados este lunes, en un acto celebrado en el Teatro Cervantes con la participación del alcalde, Francisco de la Torre; el director de Málaga Procultura (la marca municipal en la que se inserta el festival), Juan Antonio Vigar; el subdelegado del Gobierno, Teófilo Ruiz; el diputado provincial de Cultura, Víctor González; la concejal de Cultura, Noelia Losada; y el viceconsejero andaluz de Cultura, Alejandro Romero, entre demás representantes institucionales y patrocinadores. Respecto al modo en que el Festival de Málaga se adapta este año a las circunstancias de la epidemia, después de que en 2020 adquiriera rango pionero en la recuperación de la actividad cultural en España con su edición correspondiente trasladada a agosto, Vigar se reafirmó en las previsiones ya apuntadas anteriormente al confirmar que el certamen "dará prioridad a la exhibición cinematográfica frente a los eventos de carácter social", lo que se traduce en la eliminación de la alfombra roja (que quedará sustituida por un photocall exclusivo para prensa en el Hotel Miramar) y de "cualquier otra actividad en la que no se puedan evitar aglomeraciones". Confirmó el primer responsable del festival que para este año se mantienen "todos y cada uno de los protocolos y las medidas sanitarias que ya adoptamos el año pasado. Es cierto que la situación sanitaria es mucho mejor, pero el año pasado decidimos ser prudentes, con la incorporación de formatos y soluciones que significaron un banco de pruebas para todos los festivales de cine del país que vinieron después, y este año lo vamos a seguir siendo". El éxito de aquella decisión, alabada como modélica por los responsables de festivales como los de San Sebastián y Sevilla, y con un balance de cero contagios al final de la edición, invitaba a conservar los mismos protocolos y así se ha hecho.
En consecuencia, las entradas para todas las proyecciones saldrán a la venta este martes a las 9:00 en todos los canales habituales del festival (con el fin de estimular la adquisición digital) con aforos reducidos al 50% en todos los espacios implicados en la programación, tal y como sucedió el año pasado: "Aunque la situación de nivel 1 respecto al desarrollo de la epidemia en Málaga nos permitía, a priori, disponer de aforos más amplios, la necesaria preservación de las distancias de seguridad nos obliga a reducir los aforos en torno a un 50%, y así lo hemos transmitido en nuestra solicitud de autorización a la Delegación de Salud. De cualquier forma, si las autoridades sanitarias permitieran una ampliación de los aforos más adelante, actuaríamos en consecuencia", apuntó Vigar, quien confirmó igualmente que los precios presentarán una reducción también del 50% respecto a la taquilla de 2019, tal y como sucedió en 2020, "para favorecer la respuesta del público en tiempos complicados para la economía". Matizó Vigar, de hecho, que la presencialidad "es una cuestión necesaria en nuestro festival, que es un festival de encuentro, de celebración compartida, de construcción del futuro a través de ese encuentro real. El año pasado decidimos no renunciar a esta identidad y este año, con toda la prudencia, tampoco vamos a hacerlo".
Más allá de la consabida adaptación a las circunstancias, el Festival de Málaga mantiene su consideración de órdago general para el cine producido en lengua española en todo el mundo con cifras que dan cuenta del buen estado de salud del escaparate. Y es que para la nueva edición del certamen se inscribieron 2.321 producciones audiovisuales procedentes de 70 países, una cantidad similar a la del año pasado, de las que se han seleccionado 181 para las distintas secciones con 27 países representados en las distintas coproducciones. Semejante nivel de participación explica la decisión por parte del Festival de Málaga de ampliar la edición en un día, para poder dar cabida a todos los filmes seleccionadas con la correspondiente limpieza a fondo y puesta a punto higiénica de cada sala después de cada proyección. El festival vuelve a ejercer su función de foto fija lo más amplia posible de la industria, "con programaciones donde se unen trayectorias ampliamente reconocidas con cineastas emergentes, los lenguajes más comerciales con los más inclinados a la investigación y la vanguardia", tal y como explicó Vigar. El ciclo mantiene sus secciones habituales con una abultada oferta en cada caso y carteles ciertamente eclécticos, favorables a la satisfacción de todos los gustos: la Sección Oficial de Largometrajes, Málaga Premier, Documentales, Cortometrajes, los estrenos y pases especiales, los homenajes y demás enjundia contienen un paisaje en el que cada cual puede encontrar el cine que el es propio. El presupuesto se mantiene igualmente en torno a los tres millones de euros, al igual que en los últimos años, con una aportación municipal de 1,8 millones. El impacto mediático y de marca se estableció el año pasado, tal y como recordó Juan Antonio Vigar, en 57 millones de euros.
En lo que a la Sección Oficial se refiere, la sección incluye 23 largometrajes, quince españoles (cuatro de ellos fuera de concurso) y ocho latinoamericanos. El cover, debut tras la cámara de Secun de la Rosa, inaugurará el certamen el día 3 con su rango de ópera prima en anticipación a otras siete: Chavalas, de Carol Rodríguez Colás; Hombre muerto no sabe vivir, del cineasta malagueño Ezekiel Montes; Ama, de Julia de Paz; Con quién viajas, de Hugo Martín Cuervo; La casa del caracol, de la también malagueña Macarena Astorga (por primera vez, dos realizadores malagueños optan a la Biznaga de Oro); Destello bravío, de Ainhoa Rodríguez; y Las consecuencias, de Claudia Pinto. Completan la participación española en competición los nuevos trabajos de veteranos realizadores españoles: El vientre del mar, de Agustí Villaronga; El sustituto, de Óscar Aibar, y Live is Life, de Dani de la Torre. Respecto a la participación de películas latinoamericanas, el Festival de Málaga ha seleccionado Las mejores familias, de Javier Fuentes León (Perú / Colombia); Amalgama, de Carlos Cuarón (México); 15 horas, de la española Judith Colell (República Dominicana / España); Cómo mueren las reinas, de Lucas Turturro (Argentina); Karnawal, de Juan Pablo Félix (Argentina / Bolivia / Brasil / Chile / Francia / México / Noruega); Mulher océano, de Djin Sganzerla (Brasil); Años luz, de Joaquín Mauad (Uruguay), y La ciudad de las fieras, de Henry Rincón (Colombia, Ecuador). La Sección Oficial quedará completada con otras cuatro cintas fueras de concurso, todas ellas comedias de producción española: Historias lamentables, de Javier Fesser; Operación Camarón, de Carlos Therón; Sevillanas de Brooklyn, de Vicente Villanueva, y García y García, de Ana Murugarren, que con José Mota y Pepe Viyuela como protagonistas ejercerá de película de clausura.
La gala de inauguración estará presentada por las actrices Silvia Abril y Toni Acosta, mientras que en la de clausura tomará las riendas "durante una parte significativa" de la misma, tal y como expresó Vigar, el popular Santiago Segura. En cuanto a los homenajes, a los ya anunciados Premio Retrospectiva Málaga Hoy para Mariano BarrosoMálaga Hoy, Premio Málaga para Alejandro Amenábar, Premio Málaga Talent para Oliver Laxe y Premio Ricardo Franco-Academia de Cine para la montadora Julia Juaniz, se unen la Biznaga Ciudad del Paraíso para la actriz Petra Martínez y una Biznaga de honor para el director Javier Fesser. La Película de Oro será Esa pareja feliz, el clásico de 1951 de Luis García Berlanga y Juan Antonio Bardem, con lo que se dará continuidad al homenaje a este último en centenario de su nacimiento. La actriz y vicepresidenta de Academia de Cine Nora Navas, el director Carles Torras, el guionista Rafael Cobos, la productora Valérie Delpierre y la periodista Elena Sánchez conforman el jurado de la Sección Oficial. Añadan a todo esto la Gala Málaga Cinema, la exposición de retratos de cine de Ana Belén Fernández en la calle Larios, la veterana sección Afirmando los Derechos de la Mujer, la consolidación de Cinema Cocina, los conciertos y todas las demás propuestas, y obtendrán una fiesta del cine por derecho. Con la mayor prudencia pero en el lugar que le corresponde.
La 25 edición, en marzo de 2022
Afirmó Juan Antonio Vigar que la organización del Festival de Málaga ha trabajado en las últimas semanas en paralelo entre la 24 edición y la 25, que se celebrará, tal y como anunció este lunes, "en la segunda quincena de marzo del año próximo", con lo que el certamen volverá así a sus fechas habituales después de dos años marcados a fuego por la pandemia. Será una edición "muy, muy especial con un doble motivo de celebración: por un lado, el festival volverá a sus cauces normales, con todo su componente festivo, después de dos ediciones muy difíciles; y, por otro, celebraremos la ocasión redonda del 25 aniversario, algo que consideramos más que oportuno: sin tener la veteranía ni el presupuesto de otros festivales, hemos logrado una influencia y una consideración envidiables".
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