Entramos en febrero y el buen tiempo y el termómetro malagueño nos permite hacer planes al aire libre y, si tienes niños, también opción a salir en busca de alguna de esas rutas sencillas y cómodas para hacer con ellos, que disfruten del camino, el trayecto y el entorno que les rodea. En la provincia de Málaga hay muchos rincones únicos para poder recorrerlos con ellos.

Ruta circular del Santo

Existe una ruta especial y con cierto misticismo como la circula que se puede realizar en el mirador del Santo. Comenzando desde el área recreativa de la Raja Ancha, de fácil acceso desde el centro de Pizarra, podemos dar rienda suelta al entorno que rodea a esta ruta por el Valle del Guadalhorce. Cabe destacar que el tramo, al tratarse de un mirador, es en pendiente, por lo que la condición física –más bien ganas– de los pequeños debe ser tenida en cuenta. Escaleras excavadas en la tierra y multitud de pinos hasta dar con el mirador, donde reponer fuerzas y disfrutar de las vistas.

Las dos lagunas de Archidona

En Archidona podemos disfrutar de dos pequeños rutas, más bien una, para recorrer las dos lagunas que existe, llamadas la Chica y la Grande. No supone gran dificultad el paseo y los más niños más pequeños pueden completarla apenas sin problemas. El entorno regala estampas increíbles y, con suerte y algo de paciencia y silencio, se pueden disfrutar de multitud de especies de pájaros que habitan en la zona.

Sendero circular del arroyo de la Ventilla

Otro pueblo que regala rutas interesantes y sencillas para los más pequeños de la casa es Arriate. Un visita al municipio permite adentrarse por esta divertida ruta de senderismo para ir con niños, ya que tendremos que cruzar un puente de madera y algún tramo donde la vegetación es muy densa para alcanzar y transitar por el curso del arroyo de la Ventilla. De nuevo, si se va con calma y sin grandes estruendos, se puede contemplar la fauna que vive en esta zona.

Senderos de Gibralfaro

La más cerca a Málaga capital y también más recomendable para los niños posiblemente sean los senderos que hay en torno al castillo de Gibraltar, donde hay diversas rutas, no muy complejas y con un ascenso leve que no lleva demasiado tiempo y que se puede alargar o reducir en base a los ánimos del grupo de menores. Cabe destacar que en la zona hay diversos parques, uno de ellos, el que está en la denominada 'ruta naranja', triunfa entre los más pequeños.