El cielo de verano tiene sus particularidades y una de ellas se podrá ver durante las últimas noches del mes de junio. Hasta cinco planetas del sistema solar protagonizarán una conjunción que permitirá verlos en el cielo de una manera especial. Eso sí, las mejores horas para disfrutar de este particular espectáculo son las que están cercanas al amanecer, así que madrugar o trasnochar es un requisito indispensable para ello. Con el objetivo de divulgar la ciencia, explicar a los neófitos y permitir que la gente los vea de la mejor manera, la Sociedad Malagueña de Astronomía (SMA) dispondrá de telescopios en una de las playas de la capital malacitana para poder ver la conjunción. La cita es en en El Palo, en la plaza del Padre Ciganda de 5:30 a 6:45 horas del domingo. Aunque el evento astronómico será visible desde toda la provincia de Málaga.

En la actividad colabora la Junta de Distrito Este del Ayuntamiento de Málaga y los monitores de la SMA estarán en la popular plaza malagueña para explicar a los asistentes qué se puede ver y por qué en este particular cielo veraniego que propicia una conjunción de cinco planetas que se pueden ver a simple vista, pero cuyo visionado gana bastante a través de los telescopios. Esta conjunción será seguida por astrónomos y aficionados a la astronomía de todo el mundo, ya que aunque una alineación de planetas como esta no es algo habitual.

La SMA es una de las asociaciones astronómicas de más recorrido en la capital malacitana (también la Asociación Sirio) y cuenta con bastantes proyectos de índole científico entre los que destaca su sistema de detección de bólidos y meteoros. Un complejo sistema ideado y desarrollado desde Málaga que custodia el cielo de la península ibérica y los archipiélagos españoles con una red de observatorios que van reportando los elementos que entran en las atmósfera ibérica. Con este avanzado sistema se puede calcular la trayectoria, velocidad y posible caída de los elementos que entren en el cielo de la península ibérica y hasta la fecha es el más completo de este tipo. El sistema empezó a funcionar en 2017 y es posible por el trabajo de la SMA, la Universidad de Málaga y multitud de astrónomos que cumplen rigurosamente con las premisas para que los registros y las detecciones sean científicamente válidas, todo un hito astronómico con sello malagueño.