Las gangas de agosto: vuelos tirados de precio desde Málaga a paraísos como Menorca, Marrakech o Ibiza

El mes de agosto se convierte en el momento perfecto para planear una escapada desde Málaga. Con opciones para todos los gustos, desde playas de aguas turquesas hasta ciudades con historia y exotismo, el Aeropuerto de Málaga conecta con destinos nacionales e internacionales a precios irresistibles.

A través del buscador de vuelos Skyscanner, hemos seleccionado siete viajes desde Málaga con precios que no superan los 85 euros, ideales para aprovechar una semana de descanso estival. Te proponemos fechas y lugares que van del Mediterráneo más vibrante a la cultura del norte de África, sin olvidar escapadas urbanas y rutas menos conocidas.

Palma de Mallorca (38€)

• Fechas: Del viernes 22 al miércoles 27 de agosto

La capital balear es uno de los destinos más completos del Mediterráneo. Palma combina playas de postal como Cala Mayor o Illetes con una animada vida cultural y una arquitectura singular. No te pierdas la imponente Catedral de Santa María (La Seu), el castillo de Bellver o un paseo por el casco antiguo, repleto de patios interiores y tiendas con encanto. Además, agosto es perfecto para saborear la gastronomía mallorquina en sus mercados o junto al mar.

Marrakech (40€)

• Fechas: Del lunes 11 al viernes 15 de agosto

A solo unas horas de vuelo, la Ciudad Roja ofrece un cambio radical de paisaje y sensaciones. Marrakech invita a sumergirse en su zoco, perderse entre las callejuelas de la Medina o relajarse en un tradicional hammam. En agosto, aunque el calor aprieta, las terrazas con vistas al atardecer, los riads con piscina y los jardines como el de Majorelle son auténticos refugios. Ideal para quienes buscan una experiencia exótica sin salir del continente.

Ibiza (41€)

• Fechas: Del sábado 2 al miércoles 6 de agosto

Ibiza sigue siendo sinónimo de verano, pero hay muchas formas de disfrutarla. Si bien su vida nocturna es mundialmente conocida, la isla también es perfecta para explorar calas escondidas, pueblos tranquilos como Santa Gertrudis o mercadillos hippies como el de Las Dalias. Las puestas de sol en lugares como Cala Conta o Benirràs son un espectáculo en sí mismas. Una escapada para desconectar, bailar o simplemente respirar Mediterráneo.

Valencia (44€)

• Fechas: Del lunes 11 al domingo 17 de agosto

Con su equilibrio entre modernidad y tradición, Valencia se ha consolidado como uno de los destinos urbanos más atractivos de España. Desde la futurista Ciudad de las Artes y las Ciencias hasta el bullicioso Mercado Central o la playa de la Malvarrosa, esta ciudad tiene planes para todos. Además, agosto es un mes ideal para descubrir sus huertas, pasear por el antiguo cauce del Turia o cenar una auténtica paella frente al mar.

Barcelona (66€)

• Fechas: Del miércoles 6 al martes 12 de agosto

Siempre vibrante y llena de propuestas, Barcelona es una apuesta segura. Desde las obras maestras de Gaudí —como la Sagrada Familia o el Parque Güell— hasta sus barrios históricos como el Gòtic o el Born, la ciudad condal ofrece cultura, mar, gastronomía y arquitectura. Un paseo por la Barceloneta o una tarde en Montjuïc pueden completar una semana inolvidable en una de las ciudades más visitadas de Europa.

Vitoria (69€)

• Fechas: Del sábado 9 al martes 12 de agosto

Menos conocida que otras capitales vascas, Vitoria-Gasteiz sorprende por su calidad de vida, su compromiso con la sostenibilidad y su belleza serena. Su casco medieval, uno de los mejores conservados de España, invita a recorrer callejuelas llenas de historia. Además, en agosto se celebran las fiestas de La Blanca, por lo que la ciudad se llena de vida, conciertos y tradiciones populares. Ideal para quienes buscan algo diferente.

Menorca (82€)

• Fechas: Del martes 5 al lunes 11 de agosto

Auténtica joya natural del archipiélago balear, Menorca es la isla de las aguas cristalinas, los faros, los senderos costeros y la calma. Desde la playa de Macarella hasta el puerto de Ciutadella, cada rincón de Menorca respira belleza y autenticidad. Agosto es sinónimo de sol, pero también de atardeceres mágicos en Cala Morell o cenas junto al mar con sabor a marisco y vino local. Una opción perfecta para relajarse y reconectar.