Es una de esas historias increíbles que demuestra que aún queda por mucho descubrir no sólo del mundo, sino también de Málaga, de nuestra provincia. El arquitecto e investigador malagueño Pablo Farfán ha descubierto evidencias de una antigua fortaleza andalusí en las calles de uno de los pueblos más pequeños de Málaga, en plena Axarquía, hablamos de Salares.

Desde 2016 viene investigando Farfán en la arquitectura tradicional hasta dar con este castillo hasta ahora escondido para el ojo nuestro, tras documentar, trazar y comprar documentos que datan del siglo XV. Así lo cuentan en El País, donde se han hecho eco de este descubrimiento increíble. "Son referencias que luego trasladó a un mapa donde, al unir sus puntos, trazó las líneas de la que considera una vieja fortaleza del Reino de Granada", desvelan sobre esos documentos de hace varios siglos que han servido para dar con el castillo de Salares.

Las pistas estaban ahí y nos la daban las propias calles de Salares, esas callejuelas bien estrechas como casi todos los pueblos de interior de Málaga, de mucha pendiente dado al asentamiento del propio pueblo, sobre una colina, en el corazón del Parque Natural Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama. Calles como Castillejo o Torreón dejaban ver que algo había ahí aunque no había sido descubierto hasta ahora.

Se hacen eco también desde National Geographic, donde desgranan que el malagueño Pablo Farfán, tras una investigación que comenzó en 2016, logró dar con "las estructuras más reveladoras". "Identificó algunas construcciones en forma de cubo visibles cerca del edificio del Ayuntamiento del municipio. Un patrón que luego fue identificando en otros lugares más al explorar las colinas y callejones más próximos", explican sobre el hallazgo.

"Edificaciones donde coincide el uso de muros gruesos, tres o cuatro plantas de altura, ventanas diminutas y un espacio interior estrecho e inhabitable, utilizándose actualmente como trasteros o permaneciendo abandonadas", detallan sobre lo descubierto, algo que hizo encaja el rompecabezas de Pablo Farfán: "Cuando lo cartografió todo apareció lo que parece ser un sistema defensivo similar a los construidos por el Reino de Granada, con una muralla que resguardaba el castillo en la parte alta y otra algo más abajo que protegía la medina, incluso con puertas en recodo, el castillo perdido de Salares".