Abrir las aulas, una contrarreloj

El pasado viernes a las 14:00 un buen número de obreros comenzaba a salir del recinto vallado tras el que se pone en pie el Nuevo Teatinos, el único colegio público de reciente construcción que abrirá este próximo curso en Málaga capital. Pero no se iban por mucho tiempo del tajo. Ese día se doblaría turno, al igual que el sábado y el domingo. Unos 70 operarios más los cinco miembros del equipo técnico de la constructora Detea han tenido que trabajar a contrarreloj para terminar las aulas que alojarán a los niños en poco más de diez días.

Para los profanos en la materia, a falta de cuatro días para el límite de entrega de la obra, aún quedaba bastante por hacer. Pero Francisco Amaro, jefe de obra, aseguraba que iban "con prisas pero bien". "De trabajo nos queda sábado y domingo, el lunes y el martes queremos limpiar el edificio para entregarlo el mismo día 1 de septiembre", explicó Amaro. Fontaneros, carpinteros, electricistas y pintores trabajaban al mismo tiempo que los albañiles que aún le estaban dando forma a la entrada principal del edificio.

El módulo dedicado a las aulas, afirmaba el jefe de obra, es lo primero que se terminó y ya el pasado viernes tan sólo quedaba limpiarlas. Ya estaban pintadas y con la instalación eléctrica. "Los patios traseros también están listos y cuando el martes entreguemos la obra el edificio tendrá luz y agua", comentó Francisco Amaro. La entrada es lo que han dejado para lo último y lo que aún estaba menos avanzado, según los responsables.

Turnos dobles, trabajo en fin de semana y bajo presión. Confesó el jefe de obra de Detea que este colegio "no lo voy a olvidar", porque desde que se metió en el terreno la primera máquina -el pasado 4 de mayo- han tenido que soportar una carrera constante. En cuatro meses han levantado un edificio, tarea en la que, como mínimo, se suele tardar medio año. "Ha sido una locura", confesó. "Hay que correr mucho, la gente está muy presionada pero todo ha transcurrido de forma normal", explicó.

Cuando Detea entregue el edificio, Infraestructuras y Servicios Educativos aún tendrá que equiparlo. Los profesores, a buen seguro, no podrán empezar el día 1, pero los responsables aseguran que los alumnos sí que inaugurarán en la fecha prevista -el 10 de septiembre- las nuevas instalaciones. Un total de 1.737.000 euros ha invertido la Consejería de Educación en este centro que tendrá capacidad para 225 escolares de entre 3 y 5 años. La parcela colindante quedará vallada y sujeta a una futura ampliación para, según dicen desde la Junta, completar los espacios necesarios de un centro de Infantil y Primaria de tipo C3, es decir, de tres aulas por curso.