El consejo de administración de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) acordó ayer la adjudicación a Sacyr de las obras para la conexión del edificio Pablo Ruiz Picasso -conocido como terminal 2- y la nueva terminal por 11.212.260 euros y un plazo de ejecución de 12 meses.

La conexión entre ambas áreas terminales responde a la necesidad de crear espacios únicos para la recogida de equipajes, los embarques y la facturación entre ambos edificios, que quedarán unidos bajo la concepción de terminal única.

De este modo, se mantiene una continuidad entre ambos edificios con el resultado de un conjunto funcionalmente eficaz que beneficiará a los pasajeros, además de suponer menores costes de operación para las compañías.

Los trabajos contemplan actuaciones en el sótano y en los niveles de llegadas y de salidas, así como la remodelación de las escaleras de servicio, según informaron desde Aena en un comunicado. La unión de ambos edificios se realiza entre el actual edificio y la nueva terminal, de modo que la composición resulte coherente y suponga una prolongación natural de esta última. En el proyecto se han mantenido las cotas de las plantas de llegadas y salidas para permitir más fluidez y continuidad en las conexiones.