Las infracciones contra el medio ambiente, tanto delictivas como administrativas, conocidas en la provincia de Málaga han aumentado en 2023, con un total de 1.839 hechos conocidos frente a las 1.722 del año anterior. Asimismo, el número de detenidos se ha disparado, pasando de nueve en 2022 a 29 el pasado año 2023.

Así se desprende de los datos del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de los que destaca que casi todas las infracciones conocidas fueron esclarecidas, en total 1.831 –solo ocho quedaron sin esclarecer–.

Del total de infracciones, la mayoría, un total de 1.712, fueron de carácter administrativo y todas ellas fueron esclarecidas por los agentes especializados. Esta cifra registradas por la Guardia Civil también supone un aumento respecto a 2022, cuando se registraron 1.603 administrativas.

En cuanto a las infracciones delictivas, en 2023 se conocieron 127, de las que 119 fueron esclarecidas; datos igualmente superiores a los registrados el año anterior, en el que fueron 119 delitos de los que 114 fueron resueltos.

La cifra de detenidos ha experimentado un aumento significativo en 2023 con respecto a 2022, pasando de nueve arrestados a 29; mientras que el número de investigados también creció, pasando de 208 a 231 el año pasado.

Son numerosas las investigaciones llevadas a cabo por los agentes del Seprona de la Guardia Civil a lo largo de 2023 de tipo administrativo y también por distintos tipos delictivos, tales como maltrato y/o abandono de animales; incendio forestal; contra la flora y la fauna; sobre el patrimonio histórico, contra la ordenación del territorio y por tráfico ilegal de especies protegidas.

Además, dicha unidad especializada ha continuado con otras investigaciones, como la denominada 'Chaak', desarrollada bajo la dirección y en coordinación con la Fiscalía de Medio Ambiente de Málaga, contra el presunto uso fraudulento del agua en el riego de cultivos subtropicales en la zona de la Axarquía. Comenzó hace cuatro años y se han investigado 299 aprovechamientos hídricos y a un centenar de personas.