Autobuses sin conductor en el PTA

Málaga/¿se imaginan subirse a un autobús que circule sin conductor? Esta posibilidad, de cuya experiencia ya se tienen los primeros resultados en la ciudad finesa de Helsinki y en San Sebastián, forma parte de un proyecto piloto en el que están trabajando desde hace algún tiempo la Dirección General de Tráfico y el Ayuntamiento de Málaga. El propósito es el de aplicar este novedoso sistema de circulación en el transporte colectivo en el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA).

Así lo dio a conocer ayer la jefa provincial de Tráfico, Trinidad Hernández, quien si bien incidió en que se trata de una iniciativa aún por concretar, fue clara al afirmar que la apuesta del organismo estatal es que la misma tenga su epicentro en la capital de la Costa del Sol. "Queremos implantar un proyecto piloto, autobuses autónomos, sin conductor, tipo lanzadera", explicó Hernández durante la presentación del III Foro de Movilidad Alternativa y Seguridad Vial organizado por el Colegio Oficial de Gestores Administrativos de Málaga.

De acuerdo con los planteamientos iniciales, la idea es que los usuarios que llegan hasta la tecnópolis en los autobuses de la Empresa Malagueña de Transportes (EMT) puedan luego subirse a uno de estos vehículos eléctricos, que se valen de un sistema de guiado automático, para moverse por el interior del campus empresarial. "El futuro es que estos autobuses se implanten en todas las ciudades, pero ahora tienen que ser en entornos controlados", incidió la responsable provincial.

El protagonismo de la DGT en este proyecto es pleno, dado que interviene directamente con el fabricante del dispositivo necesario y financiando la actuación. "Lo implantaríamos en Málaga, que es una ciudad que atrae a mucha gente y creemos que el PTA tiene una infraestructura ideal para este proyecto", apuntó.

La iniciativa, no obstante, no es original, dado que mecanismos semejantes ya se han puesto en práctica en otras ciudades. En España, en San Sebastián, y en el resto de Europa, al menos, en Helsinki. En el primero de los casos, durante tres meses, estuvieron funcionando a modo de prueba en el Parque Tecnólogico de la ciudad vasca. Automatizados, sin conductor, con capacidad para diez plazas y una velocidad máxima de 12 kilómetros por hora. Así era el prototipo que funcionó hace ahora cerca de un año. En la capital de Finlandia la experiencia ha sido más ambiciosa, dado que se puso en marcha compartiendo espacio con el tráfico general, aunque siempre en modo prueba para, más adelante, poder potenciar su uso. Algo semejante ya se ha hecho en un ciudad como Tokyo y en un país como Holanda.