El Ayuntamiento de Málaga estudia sacar a concesión la explotación de patinetes eléctricos

Movilidad

Busca con ello controlar este nuevo fenómeno de movilidad urbana

Ya hay cuatro empresas operando en la capital

Varios patinetes eléctricos de la empresa Tier estacionados en la Acera de la Marina.
Varios patinetes eléctricos de la empresa Tier estacionados en la Acera de la Marina. / Javier Albiñana
Sebastián Sánchez

11 de enero 2019 - 03:03

Málaga/El Ayuntamiento de Málaga empieza ya a abrir la puerta a controlar el desembarco de empresas dedicadas al alquiler de patinetes eléctricos. Después de que ya sean cuatro las firmas asentadas en la capital de la Costa del Sol (VOI, Lime, Tier y UFO), el equipo de gobierno del PP maneja la posibilidad de establecer un marco de regulación mediante la adjudicación, vía concurso, de una o varias concesiones administrativas para operadores de este nuevo modelo de movilidad urbana.

A la espera de que se avance en esta línea de acción, que según fuentes municipales se encuentra aún en un momento muy inicial, se maneja un formato que haga posible fijar un número máximo de firmas con autorización para actuar en las calles de la ciudad, así como de vehículos. El planteamiento sigue la línea ya abierta en otras urbes nacionales como Zaragoza, que explora este mecanismo para tratar de ordenar un fenómeno que, en el caso de la capital de la Costa del Sol, se deja notar desde principios de noviembre.

Sea como fuere, las fuentes consultadas admiten que en el seno de la Casona del Parque sigue habiendo dudas sobre la actuación. A modo de ejemplo, se ignora si un procedimiento de concesión de esta naturaleza debería corresponder a la Gerencia de Urbanismo o al área de Promoción Empresarial, por ser el garante de la ocupación de la vía pública. Asimismo, habrá que esperar a que en el marco del pliego de condiciones se precise con detalle si se opta por otorgar la concesión a una sola empresa, de lo que parece ser partidaria el área de Movilidad, o a varias.

Un usuario de patinete, por la calle Alcazabilla.
Un usuario de patinete, por la calle Alcazabilla.

Las fuentes también subrayaron la necesidad de, antes de avanzar en esta vía, la Dirección General de Tráfico (DGT) fije los criterios definitivos para controlar el funcionamiento de los patinetes eléctricos y otros vehículos de movilidad personal en los ámbitos urbanos. Hasta el momento solo existe una directriz general, en la que se deja en manos de los municipios la concreción de ciertas acciones.

En el caso de Málaga, el Ayuntamiento viene aplazando cualquier actualización de su ordenanza de Movilidad a que el organismo estatal intervenga. Algo que podría ocurrir a lo largo de este verano. Así al menos lo anunciaron a finales del pasado mes de noviembre los responsables de la DGT.

Conforme a las primeras pretensiones avanzadas por el organismo estatal, la idea es que establecer una regulación mínima, contemplando la prohibición de circular con patinetes eléctricos por la acera –en su defecto se aprovecharían los carriles bici–, de hacerlo usando auriculares, al tiempo que se prevé limitar su velocidad a 25 kilómetros por hora. Además, los conductores de este medio de transporte podrán ser sometidos a test de alcoholemia y drogas.

La ordenanza obliga a ir por las aceras pero no a más de 10 kilómetros

A la espera de que la Dirección General de Tráfico ponga negro sobre blanco los criterios definitivos para los vehículos de movilidad personal, la actual ordenanza municipal de Movilidad obliga a que los patinetes eléctricos circulen "por la acera, acomodando su velocidad a la del peatón y nunca a más de 10 kilómetros por hora". No se recoge, por el contrario, alusión alguna al aparcamiento de los vehículos, asunto que ha encendido los ánimos de muchos vecinos del Centro histórico, que denuncian la ocupación de la vía pública por parte de las empresas de alquiler.

Si bien las firmas proponen a sus usuarios la necesidad de estacionar los patinetes en puntos que no supongan una afección directa sobre los viandantes, la realidad es que el descontrol es amplio. Esta circunstancia ha sacado a la luz el vacío legal existente en torno al funcionamiento no solo de las empresas de alquiler de estos vehículos, que no requieren de autorización municipal, sino también de la propia circulación de los patinetes. A modo de ejemplo, los agentes de la Policía Local carecen de fundamento para poder retirar los vehículos de las calles cuando están aparcados de manera irregular.

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