El Ayuntamiento de Málaga desbloquea los proyectos de la 'Manzana Verde'

El Ayuntamiento de Málaga da un nuevo paso en su apuesta por impulsar la construcción de un barrio medioambientalmente sostenible, bautizado como la Manzana Verde, en los terrenos de El Duende, en el entorno de Camino de San Rafael. Dos años y medio después de desarrollar un concurso de ideas para elegir los equipos de arquitectos a los que encargar el diseño de los primeros cinco edificios de este conjunto, la Gerencia de Urbanismo anuncia la adjudicación de los proyectos constructivos de estos inmuebles.

Estos edificios conforman la primera fase de la actuación, con la previsión de que alberguen 319 viviendas, de las cuales 279 serán de protección oficial y 40 libres. Los equipos a los que se contratan estos trabajos son los los ganadores del concurso de arquitectura. El barrio en su conjunto se concibe para acoger doce edificaciones residenciales, con capacidad para 963 viviendas (803, protegidas).

En este sentido, el proyecto básico del bloque denominado Al Sur ha sido adjudicado a la UTE Daroca y Practica Málaga, por un presupuesto de 192.977,09 euros y un plazo para su redacción de 3 meses; el del bloque Estratos Activos, a Langarita Navarro Arquitectos S.L.P., por 158.510 euros y un plazo de 2,8 meses; el del edificio Ciudad Jardín Vertical, a Rafael Urquiza Sánchez, por 76.994,72 euros y un plazo de 3 meses; el del bloque Spartan, a SV60 arquitectos S.L., por 85.305 euros y 3 meses, y el edificio eSe a Juan Pedro Romera Giner, por 63.079,72 euros y un plazo de 2,93 meses.

El proyecto de urbanización Espacio Público es adjudicado a SV60 arquitectos S.L. por 57.596 euros y un plazo de 3 meses. De acuerdo con las previsiones ya manejadas por el Consistorio, para el año que viene se prevé que el OMAU (Observatorio de Medio Ambiente Urbano) active el concurso para el desarrollo de los trabajos, así como de los primeros edificios.

La Manzana Verde es proyecto piloto de edificación que puede servir como base de buenas prácticas como ejemplo de planeamiento urbanístico, al tiempo que contribuye al objetivo de la Agenda Urbana de la neutralidad en las emisiones de gases de efecto invernadero. La misma se configura como un polígono de cerca de 90.000 metros cuadrados, donde el tráfico viario ordinario es periférico al modo de las supermanzanas (la primera en Málaga fue la almendra de Centro). La apuesta es por un modelo de ciudad compacta, con mezcla de usos y de proximidad a los servicios básicos.