Málaga

El Ayuntamiento se compromete a evitar el cierre del comedor de Miraflores

Una usuaria del dispensador-comedor recogiendo comida.

Una usuaria del dispensador-comedor recogiendo comida. / JAVIER ALBIÑANA

El mayor dispensador-comedor de Andalucía, situado en la barriada de Miraflores, alimenta a casi 2.000 personas diarias y, aunque su situación económica ponía en jaque la continuidad del mismo, el Ayuntamiento y la Junta se han comprometido a remar en sintonía para evita el cierre

Tras una reunión que se prolongó durante toda la mañana de este jueves con el Área de Derechos Sociales y del distrito Bailén-Miraflores del Ayuntamiento de Málaga, así como con la delegada territorial de Inclusión de la Junta de Andalucía, Ruth Sarabia, y el equipo técnico de la delegación, se han puesto sobre la mesa las condiciones para garantizar la supervivencia del comedor, según ha explicado a este periódico el concejal de Derechos Sociales, Francisco Pomares. 

"Hemos estado analizando las cuentas y no se puede llevar a la asociación a tener unos gastos muchos superiores de los ingresos previstos. Por ello, hay que saber decir que no y poner un límite a los usuarios que se atienden", manifiesta Pomares. 

En esa línea, el concejal del ramo ha ofrecido la ayuda del Consistorio para trabajar en conjunto y que la asociación Yo Soy Tú se una a la red municipal de comedores sociales. "Pretendemos poner orden y establecer el mismo mecanismo que hacemos con el resto de asociaciones: atender a las personas cuando se registran con nombres y apellidos, cuando son valoradas por los servicios sociales y cuando se sabe que no están siendo atendidas por otra asociación", señala.

Así, el Ayuntamiento ha pedido a Emilio Gómez, el fundador del comedor, un listado con todos los usuarios a los que atienden en el comedor. Un documento que no había facilitado anteriormente -pese a que supuestamente se le había requerido- porque "no podía facilitar datos sin contar con el permiso de esas personas", alega Gómez. Si bien, se ha comprometido a pedir las autorizaciones y entregar el listado al Consistorio.

En posesión de los datos, Pomares adelanta que harán una depuración. "En esta asociación se deberían asistir solo a los vecinos de Bailén-Miraflores, pues en cada barriada hay un comedor, incluso varios", garantiza. Además, asegura tener constancia de que la ONG de Gómez está brindando alimentos a personas que los servicios sociales han denegado el servicio porque "no lo necesitan". 

Y es que, Yo Soy Tú atiende diariamente, desde las 11:00 hasta pasadas las 16:00, a 1.872 personas –una cifra que aumenta por días–, de los que más de 560 son niños, a quienes también ofrecen un desayuno escolar. Una ayuda que, según Pomares, no debería prestar pues "a los menores con necesidades se les da el desayuno y el almuerzo en el comedor escolar gracias al playa SYGA de la Junta", señala.

En cuanto a la deuda a la que Gómez debe hacer frente -que asciende a los 125.000 euros-, la entidad bancaria se ha puesto en contacto con él para mantener un encuentro, pues, en principio, también va a remar para que el proyecto continúe hacia adelante. 

Aunque Pomares insiste en que lo principal "es disminuir el gasto que tienen", asegura que, si una vez ordenadas y organizadas las cuentas y la lista de usuarios, hiciese falta más dinero, "el Ayuntamiento o la Junta respondería", asegura. 

"Esto no es una competición de comedores de quien ofrece la mejor comida o quien atiende a más gente, tenemos que preocuparnos por reducir esas listas de personas necesitadas. Debemos ayudar a que la gente salga de la pobreza", manifiesta el concejal de Derechos Sociales, quien también tiene palabras generosas para Gómez. "Ya lo está haciendo muy bien, pero se puede hacer mejor. Yo lo he visto con una disposición muy grande, así que yo creo que vamos a avanzar juntos". 

De momento, Gómez asegura que continuará dando comidas a todos sus usuarios hasta que vuelva a tener noticias del Consistorio. Aunque lleva noches sin dormir y el quebradero de cabeza le ha traído consecuencias de salud, se muestra optimista. "Confío en que el Ayuntamiento me ayude", pronuncia. 

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