El Ayuntamiento mueve ficha por la huelga de Limasa y pide al comité negociar

Vuelta a empezar. La huelga indefinida del servicio de limpieza y recogida de basura, convocada por los trabajadores a partir del 1 de marzo, ha obligado al Ayuntamiento de Málaga a mover ficha y promover un nuevo encuentro con el comité de empresa para tratar de desbloquear la negociación del convenio origen de este conflicto. El propio concejal de Sostenibilidad Medioambiental en el Consistorio malagueño, Raúl Jiménez, dijo ayer que llamará personalmente hoy al presidente del comité de empresa, Manuel Belmonte, para iniciar las negociaciones que se dejaron aparcadas por la judicialización del conflicto.

Precisamente el argumento dado por los sindicatos para convocar un nuevo paro es que la empresa ha recurrido la sentencia del Juzgado de lo Social número 8 de Málaga que, a su entender, obliga a devolverles los derechos laborales perdidos en los últimos años. En esa sentencia, que se publicó apenas unos días de la huelga convocada para el 14 de diciembre y que finalmente fue desconvocada, se aseguraba que hasta el acuerdo de un nuevo convenio el de 2010-2012 estaría en vigor. El problema es que Limasa interpreta que deben tenerse en cuenta todas las modificaciones posteriores que se han hecho de ese documento precisamente para poner fin al resto de amenazas de huelga de los últimos tres años.

Esa es la razón por la que la dirección de la empresa, en la que el Ayuntamiento de Málaga tiene el 49% del accionariado, ha preferido mantener parada la negociación hasta que se aclare lo que debe aplicarse exactamente. Pero ahora, el edil dijo que "debemos sentarnos de una vez por todas a negociar de verdad", aunque advirtió que "todos tendremos que renunciar a algo".

En el caso del Ayuntamiento, mantuvo que el compromiso es incrementar el presupuesto en 2,2 millones de euros más para que los fijos puedan descansar los sábados en los meses de verano y contratar eventuales para reforzar la limpieza esos días. Sin embargo, advirtió que "es difícil de explicar y entender una huelga" cuando la petición de los trabajadores supondría un coste de diez millones de euros. La postura del concejal de Sostenibilidad Medioambiental no es suficiente para el comité de empresa, cuyo presidente señaló que a pesar de ello "llevamos desde el primer momento dispuestos a negociar".

A la espera de que se concrete la fecha de esa reunión, ambas partes acudirán el viernes al Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía (Sercla) para fijar los servicios mínimos después de que ayer se aplazara al haberse cambiado la fecha prevista inicialmente.

El alcalde cree "injustificado" el escenario de un nuevo paro

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, calificó de "injustificado" el escenario en el que los trabajadores de Limasa han convocado una nueva huelga, aunque se mostró "abierto al diálogo" para tratar de solucionar un conflicto del que acusó a la Junta de Andalucía. Así, recordó que en diciembre de 2013 los trabajadores y la empresa llegaron a un acuerdo para modificar el convenio colectivo y que el Gobierno autonómico "se negó a inscribir en el registro". En ese sentido, el regidor malagueño insistió en que el convenio "sí se modificó, porque las relaciones laborales del convenio 2014-2015 han sido en ese marco" y señaló que "al leer la sentencia se da uno cuenta hasta qué punto ha hecho daño esa no inscripción de la modificación del convenio por parte de la Junta". Por su parte, el portavoz adjunto de Málaga Ahora, Juanjo Espinosa, aseguró, en cambio, que "la huelga de Limasa es fruto de la incapacidad negociadora del gobierno municipal" e instó a De la Torre a que tome las riendas de este asunto "porque Málaga no se merece una huelga de limpieza".