Es el año de pensar nuevas fórmulas para seguir celebrando las tradiciones navideñas. El ya clásico belén que acoge desde hace cinco años la Casa Diocesana volverá a representarse este 2020, aunque de forma virtual debido a la situación excepcional en la que se celebra esta Navidad por la pandemia del coronavirus.

Desde casadiocesanamalaga.com, los malagueños podrán hacer una visita virtual a las distintas escenas del nacimiento del niño Dios como si estuvieran realmente en las instalaciones transformadas en la aldea de Belén como cada Navidad. Los niños del colegio diocesano Padre Jacobo serán los encargados de representar los momentos más importantes de los relatos evangélicos sobre el nacimiento de Jesús. Además, dos pastorales participarán en el apartado musical.

“En un año muy complejo por todos los motivos que ya conocemos, para los niños ha sido un regalo que podamos estar un año más en nuestro belén. Gracias a los milagros de la técnica es posible y hemos contado aquí en nuestro colegio con todo un estudio de cine en el que los niños se han sentido protagonistas”, declara el director del colegio diocesano Padre Jacobo, Alberto Ruiz. De esta forma, los más pequeños viven la llegada del adviento de forma más práctica y real.

Este belén viviente y virtual contará con varias versiones, dependiendo del público que acceda a verlo. La primera versión está especialmente dedicada a los alumnos de la Fundación Victoria. Esta representación estará disponible en la página principal de Casa Diocesana el miércoles 16 de diciembre. La segunda versión se ha diseñado para los alumnos del resto de colegios que deseen participar y se podrá ver el viernes 18 de diciembre.

Dos niñas posan en el colegio diocesano Padre Jacobo

Finalmente, el sábado 19 de diciembre se llevará a cabo la gran cuenta atrás hacia el estreno del belén viviente diocesano a las 10:00. Desde ese momento, estará abierto a todos los malagueños que lo deseen. Esta versión final contará con un mensaje especial del obispo de la Diócesis, Jesús Catalá, y estará disponible a lo largo de todo el tiempo navideño.

“Como cada curso escolar, el objetivo principal del belén viviente es evangelizar y en estas circunstancias en las que nos encontramos más si cabe. Pretendemos llevar la buena noticia del nacimiento del niño Jesús a las casas de las familias, de los niños de la fundación Victoria y malagueños en general”, admite Miguel Cristóbal Rueda, uno de los responsables de la organización.

Una de las ventajas de realizar el belén de forma virtual es que si antes recibían a unas 2.000 personas el día que abrían, este año tendrán la suerte de estar en todas las casas que quieran visitar el belén viviente virtual. “Incluso podremos llegar a cualquier punto de Andalucía y de España que tenga a bien disfrutar del trabajo de los alumnos del colegio Padre Jacobo, Casa Diocesana y Diócesis Málaga”, confiesa Rueda.

Esta iniciativa de los colegios diocesanos para hacer partícipe a toda Málaga de la alegría del misterio de la Navidad quiere tener en cuenta especialmente a los más desfavorecidos de nuestra sociedad. Por eso, en colaboración con el Consejo de Recursos Sociales de la Fundación Victoria, se llevarán a cabo diversas actividades de acción social paralelas.

Este año, el mensaje de la buena nueva llegará a todos los rincones de la diócesis de Málaga visitando incluso los hogares de quienes no pueden salir de casa o desplazarse entre ciudades. El belén diocesano cuenta con el patrocinio este año de Grupo ORP, Famadesa y La Estepeña.