Málaga quiere volcarse con el reciclaje y se encuentra en su punto álgido en materia medioambiental. La capital ha querido diferenciarse dando a conocer la existencia de los contenedores marrones, una nueva forma de separación de residuos. Desde 2022, se llevan instalando este tipo de depósitos en puntos de la provincia, pero es ahora cuando su funcionamiento entra en juego. El Ayuntamiento de Málaga ha llevado a cabo una campaña de sensibilización para fomentar el uso de esta propuesta.

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, junto a la concejala de Servicios Operativos y responsable de Limasam, Teresa Porras, ha presentado la campaña que arranca este lunes y que se va a desarrollar en este primer trimestre del año. Un equipo de información ambiental formado por más de 60 personas interactuará con la ciudadanía hasta el 21 de febrero en los 11 distritos de Málaga para dar a conocer los puntos claves de esta iniciativa.

Esta campaña irá por los distritos donde hay más afluencia de contenedores marrones: Carretera de Cádiz, Cruz del Humilladero, Málaga Este, Centro y Bailén Miraflores, entre los más concurridos.

La ciudadanía podrá conocer la campaña, el sistema de recogida de residuos orgánicos y cómo realizar de manera adecuada la separación selectiva de la materia orgánica en el hogar. Esta información será facilitada mediante cuatro puntos informativos itinerantes, a pie de contenedor y a pie de calle en zonas comerciales; de lunes a sábados de 9:30 a 20:00 y domingos de 10:00 a 14:00.

En los puntos informativos, se podrá recoger un kit formado por un cubo marrón, un paquete de bolsas compostables y materiales con información visual. "Esta campaña es como una lluvia fina, que iremos completando con acciones informativas o publicidad", ha señalado el alcalde. Durante el mes y medio también se han programado una serie de actividades, unidades didácticas en centros educativos y visitas individualizadas para acercar a la ciudadanía la problemática y explicar cómo se recoge y gestiona la nueva fracción. 

De la Torre ha manifestado que, aunque muchos contenedores marrones lleven instalados desde 2022, "no se está utilizando tanto aún como aspiramos a hacer en los próximos años". Se espera lograr los objetivos de recogida selectiva municipal marcados por la Unión Europea de al menos un 55% en 2025. Uno de los principales objetivos es que se incremente la vida útil del vertedero y se reduzca la contaminación del aire y, sobre todo, "que el compost de Málaga sea un compost de calidad”, ha afirmado el alcalde.

Uso del contenedor marrón

En cuanto al funcionamiento del nuevo contendor marrón, este deberá captar el 40% de los residuos que actualmente van a parar al contenedor gris, empleado desde entonces para la fracción resto. Los residuos que irán al contenedor marrón, los biorresiduos, son aquellos que se pueden descomponer y que producen olores, como restos de comida, servilletas sucias, bolsas de infusiones, o restos vegetales como flores y hojarasca. Además, se deberán emplear bolsas compostables, y los residuos deberán ser depositados en el contenedor a partir de las 21:00 preferentemente.

El alcalde ha confesado que, para el buen transcurso de la iniciativa, "es básico que la colaboración ciudadana sea al 100%".