La llegada de al menos una veintena de ciclistas las primeras horas del sábado a Istán ha puesto en alerta a las autoridades locales y a los propios vecinos, por lo que el Ayuntamiento de la localidad malagueña ha comunicado este acontecimiento a las fuerzas del orden.

Los vecinos se debaten entre la indignación y la preocupación por la posibilidad de que la vulneración de las normas de desescalada planteadas por el Ministerio de Sanidad pueda tener consecuencias negativas en el pueblo, donde no se ha registrado ningún caso positivo de COVID-19 desde el inicio de la pandemia, ha remarcado el Consistorio en una nota de prensa.

Istán es un destino popular entre los amantes de deportes en la naturaleza, especialmente el ciclismo, y un número considerable de practicantes de esta disciplina ha vuelto a su rutina habitual, antes de la declaración del estado de alarma y el confinamiento.

El Ayuntamiento ha puesto estos hechos en conocimiento de Guardia Civil y Policía Local de Marbella para que tomen las medidas necesarias y pongan freno a estos comportamientos. También la propia Policía Local de Istán estará "muy alerta".

"La gente tiene que entender que hay que respetar las normas y que el incumplimiento de las pautas de desescalada es motivo de sanción. No vale la excusa de 'es que yo no sabía'", ha señalado el concejal de Seguridad Ciudadana y Protección Civil de la localidad, Juan García Marín.

Él mismo ha interactuado con algunos de estos ciclistas, en concreto, "tres extranjeros". "Uno decía que venía a por agua a El Chorro y ha seguido su camino, ignorando las advertencias, y otros dos se han dado la vuelta, pero los vecinos me han informado de, al menos, una veintena de casos similares", ha explicado el edil. De hecho, algunos habitantes del pueblo, desde los balcones, han reprochado a los ciclistas este comportamiento.