La presencia de taxis en Málaga capital queda reducida a unos 250 vehículos, poco más del 20% de la flota. El acuerdo alcanzado por el sector y el Ayuntamiento redobla las medidas adoptadas al inicio del estado de alarma, cuando se rebajó a la mitad. Uno de los argumentos empleados por los taxistas es que el trabajo se ha mermado en un 80% respecto a antes de la pandemia. Al respecto, alguno de los afectados viene a señalar que los ingresos que se obtienen en la actualidad son incluso peores que los de la crisis económica de 2008.
Con ello, además, se busca "proteger a los taxistas que se encuentran expuestos mientras prestan servicio". Las medidas incluyen, además, la eliminación de los refuerzos de fin de semana, la prohibición del uso del asiento del copiloto, la obligación de limpiar y desinfectar las superficies y objetos de contacto frecuente.
De otro lado, los taxistas aconsejarán el uso de tarjetas de crédito en el pago, y durante la espera en la parada evitarán salir del vehículo, respetando la distancia de dos metros con respecto al resto de compañeros en caso de hacerlo. También se recomienda el uso de mascarilla y guantes.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios