Decorar con vinilo es negocio

Gina Sales ejemplifica mejor que nadie que con trabajo, ilusión y una idea original se puede crear una empresa de éxito en estos momentos de crisis. Siempre hay una oportunidad si se tienen las cosas claras y el apoyo necesario. Su compañía, Proyecto Vinilo, sólo tiene seis meses de vida y, por ahora, no le puede ir mejor. Especializada en la decoración gráfica en vinilo, ya tiene distribuidores por media España, una página web (www.proyectovinilo.com) perfectamente diseñada y fácil de utilizar que le está proporcionando numerosos clientes, y se está planteando la posibilidad de abrir una franquicia en Estados Unidos. "Parece que vamos muy rápido y es verdad pero lo tenemos todo muy pensado y sólo hacemos aquello que vemos que podemos cubrir bien", explica.

Pero ¿de dónde surge esta empresa? Gina es licenciada en Historia del Arte y durante un tiempo estuvo trabajando en Barcelona en casas de subastas artísticas. Regresó a Málaga y estuvo un año empleada en una galería. A su marido, especialista en diseño, le encantan las motos y las decoraba a su gusto con vinilo, por lo que vieron la posibilidad de crear una empresa que ofreciera este mismo servicio, pero aplicado a hogares, comercios, etcétera.

"Un año antes de montar la empresa aprendí cómo se utiliza el vinilo, a hacer diseños propios, a utilizar el sistema informático que se emplea con el plóter. Cuando tuve todo claro, empezamos a trabajar como empresarios".

Realizan todo tipo de dibujos, desde mujeres espectaculares, hasta flores, animales o símbolos, y se venden tanto a particulares como a comercios. En estos meses ya hay varias peluquerías, restaurantes o veterinarios con su estilo tanto en Málaga como en el resto del país. Gina señala que se están especializando en la decoración infantil "porque es un segmento muy amplio", y quieren a medio plazo decorar no sólo las paredes sino también muebles, utensilios o ropa. Han decorado ordenadores y, para volver a los orígenes, "una muchacha nos ha pedido un diseño para su moto para ir a concentraciones y estamos pensando en patrocinarla", comenta esta joven de cuya mente no paran de brotar ideas.

Son pioneros en Andalucía, tienen 25 distribuidoras en España -les acaban de encargar el diseño de varios comercios en Barcelona para la campaña de Navidad- y estudian la posibilidad de dar el salto a Estados Unidos. "Una amiga vive allí y les gustan mucho nuestros diseños. Ve viable que podamos abrir una franquicia en Houston porque a los americanos les encantan estas cosas. Estamos viendo cómo lo podríamos hacer", afirma.

Hasta hace unos días trabajaba en casa pero acaba de abrir su propio local, contratando incluso a su primer empleado. "Nos decían que estábamos locos por crear una empresa en plena crisis pero estamos muy contentos. Es algo creativo y me siento muy realizada", afirma Gina con una gran sonrisa.