Dos agresiones en apenas un par de días en centros sanitarios de la provincia. Una el lunes y otra el martes. En un caso, ataque físico e insultos. En otro, amenazas. Es una realidad ante la que los profesionales reclaman “tolerancia cero”.

CSIF denunció que este martes una mujer que presentaba síntoma de embriaguez acudió al dispositivo de Urgencias del centro de salud de San Pedro de Alcántara (Marbella). Allí, cuando una facultativa estaba examinándola, “se revolvió, la agarró con violencia y la zarandeó mientras profería insultos”. Según el sindicato, la paciente era corpulenta y la agresión no fue a más porque un familiar que la acompañaba se interpuso entre ella y la facultativa y consiguió separarla de la víctima.

La agresora abandonó el centro de salud y se sentó en unos escalones exteriores. La médico fue hasta allí para seguir atendiéndola ante su complicado estado de salud, pero la paciente se negó a recibir más ayuda. Mientras, desde el centro de salud alertaron a la Policía Nacional. Los agentes acudieron y se llevaron a la mujer a dependencias policiales. La facultativa, entre tanto, continuó trabajando. CSIF puso sus servicios jurídicos a disposición de la profesional por si quería emprender acciones legales de forma paralela a las que por protocolo inicia habitualmente el Servicio Andaluz de Salud (SAS).

Este jueves se realiza una concentración en Campanillas contra la agresión al personal

El Sindicato Médico denunció la otra agresión que se produjo el lunes en el centro de salud de Campanillas. Una paciente reclamó a una facultativa que le recetara Trankimazin. Ante su negativa a prescribirle este fármaco, la agresora solicitó el cambio de profesional. “Tras denegárselo, regresó a la consulta para amenazar a la médico en varias ocasiones , así como a otros profesionales”, según el Sindicato Médico.

Ante el cariz que tomaba la situación, personal del centro de salud solicitó la intervención de la Policía Nacional. Antes de la llegada de los agentes, la mujer salió huyendo. Pero como los sanitarios conocían la identidad de la paciente –“una mujer un tanto conflictiva”– la doctora y los demás profesionales pudieron interponer la correspondiente denuncia. Este jueves, el Sindicato Médico ha convocado una concentración a las 11:00 en el centro de salud en repulsa por lo ocurrido.