Málaga

Educación cambia la cocina por comida transportada en una treintena de centros

  • El ISE ha eliminado del concurso de comedores la elaboración 'in situ' en los colegios · Además, el precio del menú ha subido unos 12 euros al mes y las bonificaciones han cambiado, por lo que muchos pagan más

En el colegio Guadaljaire, en la Carretera de Cádiz, llevaban 24 años cocinando para los pequeños comensales en sus propias instalaciones. En todo este tiempo, y según explica la directora del centro, "jamás hemos tenido un problema de intoxicación". Pero para este curso no ha servido de nada su reputación intachable. La empresa concesionaria del comedor, la misma de otros años, ofrecerá comida transportada en lugar de cocina directa, un cambio de sistema impuesto por Infraestructuras y Servicios Educativos (ISE) de la Junta de Andalucía y que ha afectado a todos los comedores que han salido a concurso público este curso, unos 140 en la provincia. De éstos, más de una treintena ha perdido la cocina in situ que venía practicando usualmente a cambio del reparto de platos ya elaborados.

"La adjudicación de comedores este año ha cambiado y en el pliego de condiciones no se contempla que se pueda realizar la comida en el propio centro", explica Marisol Luque, presidenta de Fdapa, que teme que el próximo año "desaparezcan todas las cocinas, ya que el resto de centros sale a concurso el año que viene y la cuestión irá por el mismo camino". Para amparar esta orden de la que ni centros ni padres han tenido información hasta la vuelta de las vacaciones alegan, según Fdapa, "cuestiones sanitarias". Sin embargo, "no entendemos por qué no exigen que se cumpla la normativa sin tener que eliminar la cocina".

Los padres ya están mostrando su descontento con esta medida porque "temen que la comida no venga bien, que pueda llegar tarde y en mal estado", explica Luque y afirma que diariamente entregan en la delegación de Educación quejas de Ampas, consejos escolares y particulares. Además, desde la Federación de Asociaciones de Padres consideran que se ha cambiado el modelo sin hacer una inversión adecuada en la adaptación de las instalaciones y añaden que "si dicen que los centros no reúne las condiciones necesarias para cocinar cómo van a poder conservar los alimentos durante varios días".

Aunque existe la línea en caliente con reparto diario, predomina la de frío. Dos días a la semana envían a los colegios la comida que luego se calienta en hornos de inducción. Eso lo sabe bien Marta Fernández, madre de dos niños que estudian en el CEIP Antonio Machado. "La comida de mis hijos viene desde Sevilla, lo que se comieron el lunes lo trajeron el viernes", se queja. Pero aunque Marta prefiera que sus hijos coman el menú recién hecho éste no es su principal problema. Este año los precios del comedor han subido 60 céntimos al día, unos 12 euros al mes, y ella ha pasado de tener una subvención del 50% a no contar con ninguna.

"Trabajo hasta las 16:00 y para mí el comedor es imprescindible, pero voy a tener que dejarlos sólo dos días a la semana y tirar de la ayuda de los abuelos el resto", explica. Como ella, muchos padres han visto recortada su bonificación este año ya que se han modificado los parámetros. Si antes daban un 25, un 50 ó un 100% de subvención, este año hay hasta siete tramos desde el 10 al 100%, según criterios de renta. Aunque esta medida promete ser más justa, "es cierto que ahora muchas familias perciben que les ha bajado la subvención porque antes la horquilla era más amplia y dos familias con ingresos diferentes podían optar a una misma bonificación del 50%", comenta Marisol Luque.

Aunque aún la lista de subvenciones es provisional porque en algunos casos no se han adaptado a la nueva normativa, en colegios como Blas Infante, en Ciudad Jardín, los padres están mostrando su desconcierto. Ya unos cuantos, dicen desde el centro, se han dado de baja.

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