El sector inmobiliario tiene que tirar de imaginación y esfuerzo si quiere salir del periodo de ralentización en el que se encuentra. Los expertos consideran fundamental que, ante la paralización de la construcción en Málaga y Andalucía, las promotoras apuesten por abrir nuevas líneas de negocio y entrar en otros países para asegurarse los ingresos y no engrosar la lista de empresas desaparecidas. "Las empresas inmobiliarias deben diversificar su producción e internacionalizarse porque los ciclos son diferentes en cada país. A lo mejor es mal momento para hacer viviendas en España pero puede ser bueno para levantar pisos en Polonia, oficinas en Alemania o industrias en Budapest", afirmó Andrés García, director del Centro de Investigación y Formación para la Alta Dirección de Empresas Inmobiliarias (Cifadi) que ha creado en Málaga el Instituto Internacional San Telmo y que fue presentado ayer de forma oficial.

García también abogo por una mejora de la eficiencia en la gestión de las compañías ya que "hay muchas que han hecho los deberes y están preparadas para el cambio de ciclo y otras no".

García precisó que la escuela de negocios andaluza hará tres jornadas sobre la situación actual del sector inmobiliario y la operatividad de las empresas en abril, junio y octubre. Además, cada seis meses los profesores de San Telmo realizarán un análisis de coyuntura.

Antonio García de Castro, director general del Instituto San Telmo, y Santiago de la Cruz, consejero delegado del despacho de abogados Martínez-Echevarría, Pérez y Ferrero, también disertaron sobre el comportamiento actual del sector y aseguraron que no prevén una bajada en el precio de los inmuebles. "En los momentos de crisis no suele haber grandes oportunidades de compra porque las empresas que están bien posicionadas han conseguido el suficiente margen para no tener prisa por vender", afirmó el directivo de San Telmo.