Fallece la cría de foca ártica que fue capturada en el Guadalmedina

Murió como consecuencia de la debilidad que sufría y de su desnutrición · Fue arrastrada por las corrientes marinas realizando un trayecto de unos 4.000 kilómetros

La cría de foca que fue capturada el martes por la noche.
La cría de foca que fue capturada el martes por la noche.
R. L. / Málaga

05 de octubre 2012 - 01:00

La cría de foca de casco, procedente del Ártico, que fue capturada en la noche del pasado martes en la orilla del río Guadalmedina falleció ayer ante el mal estado de salud que presentaba, según confirmó un portavoz de la Delegación de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía. Al parecer, la cría, un macho de unos cuatro o cinco meses, pesaba una cuarta parte de su peso normal -a su edad debía alcanzar en torno los 40 o 50 kilos-, y, además, presentaba trastornos gastrointestinales.

Ante esta situación, las labores de recuperación a las que estaba siendo sometida en el Centro de Recuperación de Especies Marinas Amenazadas (Crema) no han permitido salvar su vida. En el momento de su avistamiento, la cría ya se encontraba débil, según informaron fuentes del Crema. Se estima que, procedente de la zona situada entre Irlanda y Escocia, esta foca, que fue avistada por primera vez en la capital el pasado lunes, habría sido arrastrada hasta el Mediterráneo por las corrientes marinas, pudiendo haber realizado unos 4.000 kilómetros de distancia. "La cría estaba hambrienta, deshidratada, llegó con diarrea y bastante débil", explicó Juan Jesús Martín, biólogo del Aula del Mar. El veterinario le había realizado una radiografía en la que no se observaron piedras ni otros objetos ingeridos que pudieran provocar úlceras en el estómago. También le practicó una analítica que mostraba "un cuadro intestinal", por lo que le suministraron antibióticos y un protector hepático para ver cómo evolucionaba". En la exploración inicial también destacaron los expertos su falta de peso, ya que marcó 28 kilos cuando por su edad tendría que pesar entre 40 y 50.

Desde el pasado lunes comenzó a avistarse, primero en el espigón de la Térmica y luego en el río y fueron varias llamadas de particulares las que recibieron en el Aula del Mar. Sin embargo, el rescate fue complejo "porque cuando veía gente se iba, fueron varios los intentos hasta que la cogimos en la orilla, la aislamos del agua y con una manta pudimos manejarla", relató Juan José Castillo. Estas focas de casco pueden nadar hasta 1.000 kilómetros sin tocar tierra, su destete se produce a los cuatro días de nacer y se convierten en cazadoras de peces.

stats