Gallery Hoteles invierte 3,5 millones en la renovación integral del Molina Lario

El Hotel Molina Lario de Málaga capital permanecerá cerrado hasta el próximo 16 de febrero, según información contenida en su propia web, debido a los trabajos de remodelación a los que está siendo sometidos desde el pasado día 2. La intervención tiene un coste estimado por parte del Grupo Gallery Hoteles de unos 3,5 millones de euros, incluyendo la completa renovación del establecimiento.

Este proyecto de reforma afecta a las 103 habitaciones y baños, zonas nobles y terrazas, pone también "una especial ilusión en el lanzamiento de una nueva marca de restaurante que se desvelará en marzo del 2018; una muestra más de la apuesta de la compañía por el nivel gastronómico de sus establecimientos", apuntaron desde la propia cadena. La directora general de Gallery Hoteles, Marta Golobardes, apuntaba hace unas semanas que el proyecto de intervención ya en marcha en la capital de la Costa del Sol tiene el objetivo de "seguir siendo referentes en la oferta turística de esta ciudad". El Molina Lario cuenta con una situación privilegiada en el Centro histórico de la capital de la Costa del Sol, justo enfrente de la Catedral y a escasos metros del Puerto, el Museo Picasso y la zona peatonal de la urbe.

"La idea de la propiedad es mantener el estándar y el nivel de calidad y de servicios que Málaga y el cliente siempre han tenido en el Molina Lario", explicaba ayer la directora del establecimiento, Miriam Ortiz, quien si bien admitió que las instalaciones se encontraban en "perfectas condiciones, se ha decidido ponerlas tan bonitas como Málaga y continuar con ese nivel de exigencia y excelencia". La operación toca de lleno la totalidad de las 103 habitaciones y otras dependencias como el restaurante, al tiempo que se aprovecha para pintar y limpiar la fachada, actuar sobre la recepción... "El cliente habitual lo va a notar para bien", expuso.

Las primeras tareas en el plan de renovación se iniciaron a finales del pasado mes de octubre, sin que las mismas interfiriesen en el funcionamiento normal del hotel y a los clientes. Es ahora cuando se aplica el cierre del establecimiento, una vez se empieza la intervención sobre el restaurante y sobre las cuatro plantas que quedaban pendientes.