El Gobierno permite una dedicación parcial del 75% a los alcaldes 'pequeños'

El Consejo de Ministros dio ayer luz verde a los salarios máximos que podrán percibir los alcaldes en función de la población de sus municipios. El tope se establece, en el caso de la provincia de Málaga, para la capital de la Costa del Sol, cuyo regidor ve elevado hasta los 100.000 euros el límite salarial. La cuantía supone un 47% más de lo que en su día aconsejó la Federación de Municipios y Provincias de Andalucía (FAMP) para estas localidades, situando los emolumentos en casi 68.000 euros.

Cabe recordar que esta máxima es aplicable igualmente al presidente de la Diputación, que en la actualidad tiene un sueldo unos 30.000 euros inferior. En el caso del regidor malagueño, Francisco de la Torre, la mayor parte de su salario procede del Senado, cargo que ocupa desde el inicio de la presente legislatura. Su labor en la Cámara Alta le reporta del orden de 77.600 euros, a los que añadir otros 11.000 por asistencia a los plenos municipales.

La determinación del Gobierno central corrobora los parámetros ya aprobados en la nueva Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local y pone cifras a los sueldos que podrán percibir los miembros de los ayuntamientos. En este sentido, abre la mano sobre los regidores de las localidades con menos habitantes, puesto que si bien mantiene la eliminación de la exclusividad en su labor, sí marca parámetros económicos considerables para dedicaciones parciales del 75%, del 50% y del 25%.

En concreto, su aplicación afecta de lleno a 25 pueblos malagueños con un censo inferior al millar de residentes. Los máximos mandatarios locales de los mismos pasarán a cobrar entre 30.000 y 15.000 euros, dependiendo de si optan por el máximo de la dedicación parcial contemplada o la menor. Por su parte, aquellos que elijan la fórmula del 50% tendrán una remuneración bruta anual de 22.000 euros.

"Excepcionalmente, podrán desempeñar sus cargos con dedicación parcial, percibiendo sus retribuciones dentro de los límites máximos señalados al efecto en la Ley de Presupuestos Generales del Estado", destaca el acuerdo adoptado ayer por el Gobierno.

Sea como fuere, el texto aprobado finalmente por el Congreso de los Diputados a finales del año pasado suaviza las restricciones económicas de los dirigentes municipales. Así, por ejemplo, si hasta el mes de octubre, en los borradores que se manejaban, se apuntaba la posibilidad de acotar los emolumentos de los alcaldes de localidades de entre 1.000 y 2.000 habitantes a 20.000 euros, y a aquellos de entre 2.000 y 5.000, a 30.000 euros, la decisión final engloba a todos los municipios con entre 1.000 y 5.000 vecinos (46 en la provincia) para que tengan un salario de hasta 40.000 euros.

Preguntada sobre la aplicación de estos límites, la secretaria general del PP de Málaga, Margarita del Cid, destacó el "esfuerzo que se hace por racionalizar el gasto en todas las administraciones" y recordó que en el caso de los alcaldes de menos de 1.000 habitantes "no tienen dedicación exclusiva, porque lo alternan con su trabajo y otras tareas".

No obstante, durante en los meses previos a la redacción final del texto normativo las críticas de los pequeños alcaldes fueron constantes. Al punto de que muchos de ellos aludieron a la imposibilidad de mantenerse al frente de los ayuntamiento si no disponían de dedicación exclusiva.