Dice el refrán que las cosas de palacio van despacio. Y las de Salud, más todavía. La apertura del Hospital Pascual bajo gestión pública fue planteada hace más de un año y medio por la Administración autonómica como la “solución inmediata” para la falta de camas en la provincia. Pero de momento su puesta en marcha sigue sin fecha. Cada vez que se pregunta a la Administración sanitaria, la respuesta es que están trabajando en el plan funcional.

El centro sanitario privado se cerró en julio de 2018 de forma temporal por un año debido a la falta de pacientes. Entonces, aplicó un expediente de regulación de empleo (ERTE) a sus 66 trabajadores. Sin embargo, nunca reabrió. Durante la pandemia se barajó su uso y el de las instalaciones del Hospital Auxiliar de Carranque, pero ninguno llegó a utilizarse nunca.

Pasado el periodo crítico del Covid, la Consejería de Salud anunció que su edificio de la calle Amargura se usaría para sumar sus 200 camas a la red hospitalaria pública malagueña, que es la que tiene la peor ratio por habitantes de estos recursos de Andalucía.

En octubre de 2022, el entonces viceconsejero de Salud, Miguel Ángel Guzmán –envuelto ahora en la polémica por su fichaje por Asisa–, en declaraciones a Málaga Hoy, comprometió su apertura para el primer semestre de 2023. Dijo también que era una “solución inmediata” a la falta de camas en la provincia mientras se construía el tercer hospital. Señaló entonces que no sería un mero traslado, sino una “ampliación” del Hospital Regional y que funcionaría como un pabellón más del complejo, formado por el edificio principal de la Avenida Carlos Haya, el Materno y el Civil.

Pasó el tiempo y cuando llegaron los primeros meses de 2023, Salud retrasó su apertura al segundo semestre de ese año. Pero tampoco cumplió. A mediados de junio, Salud aceptó la cesión gratuita del inmueble por cinco años e informó que en la primera fase tendría 350 trabajadores. En julio, la consejera, Catalina García, volvió a posponer su apertura: afirmó que comenzaría a funcionar “en los primeros meses de 2024”.

Pues bien, ya son los primeros meses de 2024 y desde la Administración autonómica no se da fecha. Así que aquella “solución inmediata” que prometió Guzmán, en octubre de 2022, continúa sin concretarse un año y medio después.

Durante la gestión socialista, la Junta de Andalucía mantuvo un litigio con Pascual que le reclamó una deuda de más de 257 millones de euros por los servicios prestados. Durante décadas, este hospital privado fue clave en los conciertos del SAS. Pero con la irrupción de potentes grupos hospitalarios en la provincia, el centro sanitario entró en declive.

Durante la etapa del PP en la gestión autonómica, a finales de 2022, el Consejo de Gobierno aprobó un decreto que autorizó un acuerdo para el pago de más de 121 millones de euros a la entidad mercantil José Manuel Pascual. Así se cerraron litigios pendientes.

El Hospital Pascual sumará unas 200 camas a la sanidad pública malagueña. Aunque se prevé que sirva para las más variadas patologías y para derivaciones desde todos los centros sanitarios de la provincia, se perfila con una orientación sociosanitaria, de paliativos y pacientes de media y larga estancia. Así, los otros hospitales como el Regional, el Clínico, el Costa del Sol o los comarcales podrán centrarse más en la atención a los enfermos con cuadros agudos y más complejos.