El IES Jesús Marín inicia el superior de automoción sin dinero de la Junta

En el IES Politécnico Jesús Marín están contentos y orgullosos de poder poner en marcha el grado superior de automoción, que se da por primera vez en un centro público de la provincia. Ahora los alumnos no tienen que optar por un colegio privado ni marcharse a otras provincias. "El problema es que la Junta nos ha dado el ciclo sin dotación económica alguna, sin una partida para iniciarlo ni comprar el material que se necesita para trabajar con los alumnos", explica el jefe del departamento de automoción, Manuel Jesús Vega Yerbes. Con recursos propios del centro, con imaginación y, sobre todo, con el esfuerzo de los docentes han comenzado las clases para jóvenes procedentes de Bachillerato o grados medios.

"El dinero lo estamos sacando de la dotación general, no ha llegado la partida inicial, está claro que es porque las cosas están muy difíciles", considera Arturo Fernández Sanmartín, director de este instituto que tiene más de 2.300 alumnos matriculados. "Llegaremos hasta donde podamos sin meternos en terrenos pantanosos con los presupuestos, no podemos ni acercarnos a los números rojos, trabajamos con remanentes porque tenemos a muchos proveedores a los que no podemos defraudar", añade Fernández Sanmartín.

Han realizado una pequeña obra que, principalmente, ha consistido en tirar tabiques y desescombrar para tener espacios más amplios en la que han invertido unos 4.000 euros. Se ha recurrido a un acuerdo que tienen con el Ayuntamiento que ceden los coches abandonados en la vía pública y si les faltan piezas las compran en los desguaces. Otras, las fabrican los propios profesores para abaratar costes. "Las maquetas de sistemas eléctricos y auxiliares las estamos haciendo nosotros, hemos comprado los hierros y el material eléctrico y las estamos montando aquí", comenta Vega Yerbes, que sí cuenta con la dotación de funcionamiento que deberá abonarles la Junta de Andalucía.

"Automoción tiene mucho déficit porque es una familia profesional muy cara", sostiene el director del centro. "La Consejería de Educación nos facilita lo que puede, pero es verdad que nos quedamos cortos, siempre es poco el material", agrega. Aún así, el ciclo está en marcha pendiente de la cuarta adjudicación, con la que se completará la treintena de estudiantes. "Ha habido mucha demanda, era un ciclo muy querido", según admiten desde el departamento y aseguran que "hacía falta de verdad en Málaga, porque quien quería estudiarlo tenía que pagarlo".

Este ciclo imparte el doble de materia de un grado medio, por lo que la teoría supone el 60% y el cuarenta restante la parte práctica. "El primer mes y medio están metidos en el aula para coger ciertos conceptos necesarios para poder salir a trabajar al taller", explica el jefe de departamento. Aquí se estudia un mixto de los dos grados medios, Carrocería y Electromecánica. "Es como unir los dos en uno y se le añade gestión y logística del automóvil", añade Vega Yerbes. En el segundo curso, tendrán más de 400 horas prácticas en empresas. En este primer periodo, se hará mucho hincapié en la seguridad e higiene en el trabajo.

Este primer año del grado superior de Automoción sólo estudian dos mujeres, una de ellas es María Menor. Tiene 26 años, hizo Bachillerato, luego el grado medio de Electromecánica y ahora su reto es el superior de cara, sobre todo, a colocarse en la ITV. "Siempre andaba montando y desmontando cosas, lo tenía clarísimo porque me ha gustado desde niña", comenta María, que no se hubiera planteado un privado, "no me lo puedo costear", afirma. María trabaja en una tienda por la mañana y por la tarde asiste a clase junto a sus compañeros, entre ellos José Francisco Maldonado, de 20 años. Ha estudiado Bachillerato y algunos conceptos aún le "suenan a chino". Sin embargo, la salida profesional le atrae y le está gustando todo lo que aprende en el ciclo. "Creía que iba a ser más difícil estaba un poco asustado porque no tenía mucha idea, pero voy bien", considera. El 80% de estos alumnos aprobarán el curso.