Málaga capital ya crece

La ciudad tuvo en 2012 un aumento del PIB del 0,5% gracias al turismo, mientras que en el conjunto provincial cayó un 1%

Cientos de personas pasean, ayer por la tarde, por calle Larios.
Ángel Recio Málaga

28 de junio 2013 - 01:00

La economía de Málaga capital ya ha conseguido salir de la recesión. El año pasado aumentó su Producto Interior Bruto (PIB) un 0,5% y mantuvo su nivel de empleo, lo que le permite mirar al futuro con algo más de optimismo respecto al resto de la provincia y de otros lugares. Así lo aseguran los expertos de Analistas Económicos de Andalucía -un grupo de estudios dependiente de Unicaja- en el anuario Málaga. Economía y Sociedad 2012 que edita la Fundación Ciedes y que ayer fue presentado de forma oficial.

En ese informe se señala que en 2012, por primera vez en los últimos cuatro años, la economía de Málaga capital tuvo un comportamiento positivo, presentando así una tendencia contraria a la media provincial (en la que se estimó un descenso del 1%), andaluza (-1,7%), y española (-1,4%). Felisa Becerra, coordinadora del informe, justificó ese empuje de la ciudad en el buen comportamiento del sector servicios y el turismo. En este sentido, subrayó que el número de viajeros y de pernoctaciones crecieron en Málaga el año pasado por encima del 4% y que, incluso, hubo incremento de turistas nacionales, cuando en general el mercado local está de capa caída. A eso habría que añadirle el tirón de los turistas de crucero. Traducido a números, el empleo en el sector servicios creció el año pasado un 2,2% en la capital y este área representa el 90% del total de ocupados en esta urbe. Dicho de otra forma, si al sector servicios le va bien, a la ciudad también.

"La ciudad creció y el desempleo se mantuvo. Hablar de un 0,5% no es poco. Cuando la economía crezca, Málaga lo hará más porque el sector servicios y el turismo tienen un gran potencial y pueden explotar más, por lo que hay que ser positivos", indicó Francisco García Navas, director de Analistas.

En el estudio se incluye una gráfica sobre la evolución del PIB tanto en Málaga ciudad como en la provincia entre el primer trimestre de 2006 y el cuarto trimestre de 2012. Es llamativa porque entre 2006 y el tercer trimestre de 2010 siguen una línea más o menos similar, pero a partir de esa fecha toman caminos distintos. La capital se mantuvo en negativo durante un año, mientras que en el resto de la provincia creció. A partir del último trimestre de 2011 la situación fue la inversa, es decir, creció la capital y cayó la provincia. Lo más preocupante es que el último trimestre del pasado año fue malo para las dos, siendo especialmente significativo el descenso del 1,8% en la provincia.

¿Quiere decir eso que el crecimiento de la capital puede haber sido un espejismo y que la provincia no levanta cabeza? Los expertos quieren trasladar un mensaje positivo, pues la confianza es clave para recuperar el terreno perdido. Afirman que se prevé un buen 2014, pero se desconoce cómo acabará el año en el que aún estamos. Tampoco es fácil hacer previsiones ya que, en un mundo globalizado, cualquier cosa que ocurra en Estados Unidos, China, Japón, Europa y hasta Australia puede afectar de forma directa a la economía local. "El 2012 empezó mejor de lo que acabó", reconoció García Navas, quien destacó que nos encontramos con "escenarios muy cambiantes". "Tu puedes hacer tus deberes y tener buenos indicadores pero dependes de los demás, porque estamos en un efecto dominó. Nosotros tenemos que hacer nuestros deberes y esperar que fuera no nos lo tiren todo", añadió.

La tasa de paro tanto en Málaga como en la provincia está por las nubes y la situación es complicadísima para miles de familias, que están viviendo auténticos dramas para salir adelante. No obstante, a escala macroeconómica, la provincia está salvando más o menos los muebles con el turismo por bandera. El año pasado el PIB provincial se elevó a 28.314 millones de euros y se mantiene por séptimo año consecutivo por encima de los 25.000 millones. En 1995, por ejemplo, el PIB malagueño apenas ascendía a 10.000 millones de euros. Ocurre lo mismo en el PIB per cápita, que ha pasado de los 5.000 euros en 1995, a los 17.253 euros de 2012.

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