Málaga es la sede de un proyecto piloto europeo para investigar y desarrollar tecnologías sobre seguridad en ciudades e infraestructuras críticas. El proyecto se denomina Surveiron, se inició este pasado 1 de marzo, está liderado por la empresa malagueña Aeorum y cuenta con la colaboración de seis cuerpos policiales de la Unión Europea, que se desplazarán hasta Málaga durante los dos próximos años para asesorar y realizar las pruebas oportunas. Se utilizarán, entre otros sistemas, drones para mejorar la seguridad en las urbes.

Aeorum contará con 2,5 millones de euros de fondos europeos tras haber resultado ganadora del programa Instrumento Pyme en el plan Horizonte 2020, compitiendo con pymes innovadoras de toda la UE, Noruega, Turquía e Israel. "Hemos conseguido la mejor calificación de Europa y con Surveiron vamos a desarrollar un sistema de información que detecta y analiza riesgos en entornos urbanos e infraestructuras críticas y que, además, proporciona un plan de acción para hacer frente a esas amenazas", explica Jesús García, uno de los fundadores de la empresa.

Aeorum nació en 2009 de la mano de los ingenieros de telecomunicación Jesús García y Francisco David Trujillo y del ingeniero informático Manuel Ruiz de Quintanilla. Han sido dos veces premio Spin Off de la Universidad de Málaga y durante estos años han apostado por la innovación y la investigación en inteligencia artificial, visión artificial con la detección, reconocimiento y análisis de entornos y situaciones, y la gestión automatizada e inteligente de flotas robóticas y drones, movilizando 10 millones de euros de fondos europeos para I+D en tecnologías de seguridad. Sus colaboradores y clientes son cuerpos y fuerzas de seguridad del estado español y europeos y sistemas de emergencia civiles y militares. En este último aspecto, como muestra, la empresa investiga tecnologías en el Centro Municipal de Emergencias tras suscribir un acuerdo de colaboración con el Ayuntamiento de Málaga y la UMA en 2014.

Entre las innovaciones que desarrollan tienen, por ejemplo, un sistema que permite detectar incendios, medir con qué velocidad se pueden propagar las llamas, qué zonas se verán antes afectadas y en cuántos minutos sería necesario evacuar para que no hubiera heridos. Toda esa información se traslada en tiempo real a los bomberos para que tomen las decisiones oportunas. También cuentan con sistemas de detección de grietas para la protección de infraestructuras críticas y otros entornos urbanos, o sistemas de escaneado de entornos en tres dimensiones, todo aplicado a seguridad.

Surveiron es uno de sus grandes proyectos, pero están inmersos en otros de igual consideración. Uno de ellos se llama DroneCaptor y analiza cómo defender un determinado territorio o una infraestructura de otros drones, con las amenazas que ello pueda suponer. El proyecto tiene una financiación de tres millones de euros del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) de los que Aeorum recibe en torno a un millón para investigación. Ya está en desarrollo, tiene una vigencia de dos años y la empresa malagueña cuenta con la colaboración de la Policía Nacional y del Centro Nacional para la Protección de Infraestructuras Críticas. "Analizamos mucho la rentabilidad y eficiencia de los modelos policiales porque la amenaza no tiene fronteras pero, por suerte, la innovación tampoco", comenta García.

Su tercer gran proyecto es un proyecto que le ha concedido la Comisión Europea para la gestión de ataques CBRNE (químicos, bacteriológicos, radiactivos, nucleares y explosivos) en colaboración con varios cuerpos militares europeos. "Investigamos la gestión con drones de ataques o de catástrofes, como ocurrió por ejemplo en Fukushima y la empresa cuenta con unos 500.000 euros", añade García.

En enero la firma malagueña recibió en Roma un premio europeo por parte de Enel-Endesa por un proyecto para el mantenimiento automatizado de grandes plantas solares con drones, llamado Helioxcan, que ha llegado a publicar la revista del Instituto Tecnológico de Massachusetts, el prestigioso MIT, mientras que a escala local fue elegida Joven Empresa Innovadora por la Asociación Andaluza de Ingenieros de Telecomunicación.

Han desarrollado muchos proyectos de investigación y ahora también se lanzarán al mercado para hacer productos a medida a clientes, habiendo ya realizado contactos en Europa, Emiratos Árabes, Estados Unidos y México. Eso supone que vayan a aumentar su plantilla, pasando de los 20 actuales a más de 30 en el presente año, siendo todos ingenieros de telecomunicación, informática e industriales de la UMA. Están en el PTA, van a casi triplicar sus instalaciones para incorporar nuevos laboratorios para tecnología de drones y antidrones, y prevén facturar unos dos millones de euros este año.