Málaga

Málaga no ajustará el salario de los operarios de limpieza por el cumplimiento de objetivos hasta 2023

  • La previsión es que los criterios que se aplicarán sean acordados con los trabajadores antes de finales de junio

Imagen de archivo de un trabajador de la antigua Limasa.

Imagen de archivo de un trabajador de la antigua Limasa. / Javier Albiñana

El Ayuntamiento de Málaga ya reconoce abiertamente que no podrá cumplir una de las claves que justificaron la municipalización del servicio de limpieza, la vinculación de una parte del salario a la productividad de la plantilla, hasta el año 2023. Será en ese momento, cuando, según ha expuesto este viernes la concejala del ramo, Teresa Porras, se empezará a medir el cumplimiento de una serie de objetivos en la labor diaria de los operarios y que condicionará el abono del 40% de los 1.472 euros fijados para la denominada paga de enero.

La aplicación de estos parámetros es objeto en la actualidad de negociación con el comité de empresa, según ha reconocido el gerente de Limasa, Raúl García Payne, quien ha precisado que el compromiso de las dos partes es que antes de final de junio estén fijados los medios que se emplearán para realizar esta medición.

A ojos de Porras, el calendario fijado para concretar estos detalles queda justificado en todo el proceso de formalización de la nueva entidad. Pero no sólo. Porque desde su punto de vista, es necesario que los operarios "sepan cuales van a ser las bases de esa productividad con sanciones o sin sanciones". 

"El trabajador debe estar informado porque se juega su paga de productividad y debe tener un rodaje para eso", ha insistido la edil, para la que "se están haciendo son las cosas con mucha cabeza". En este sentido, ha puesto en valor que a diferencia de lo que ocurría en el anterior escenario de la antigua Limasa III, con capital mayoritariamente privado, ahora sí se esté midiendo el absentismo como elemento de referencia a la hora de pagar en su totalidad la paga de enero.

Aunque para Porras no se está actuando con retraso, los hechos ponen en cuestión esta impresión. Hay que recordar que desde que el alcalde, Francisco de la Torre, puso sobre la mesa un posible modelo público, subrayó la necesidad incondicional de que una parte del salario de los empleados de Limasam estuviese vinculado al cumplimiento de objetivos. Publicaciones de 2016 ya aludía a esta criterio como algo esencial desde el punto de vista del equipo de gobierno.

El camino de la municipalización, como tal, se inició a mediados de 2018, cuando de manera sorpresiva confirmó su apuesta decidida por iniciar el proceso. El mismo, tras un camino no exento de complicaciones, culminó el 1 de julio de 2020, cuando oficialmente empezó a funcionar Limpieza de Málaga, Limasam.

La puesta en marcha de la entidad trajo consigo la adaptación del convenio laboral vigente, cuya vigencia es de 2019 a 2022, pero quedando en suspenso los criterios a aplicar sobre el 40% de la paga de enero. De acuerdo con lo pactado con el comité de empresa, la productividad no se tendrá en consideración ni para la paga de 2020, que ya se ha abonado este año, ni para la de 2021, que se abona en 2022. 

Lo que sí se ha tomado ya en consideración, según enfatizó Porras, es el absentismo, buscando con ello fomentar la asistencia al trabajo. Conforme a lo recogido en el nuevo marco laboral, una parte del ingreso extraordinario de enero puede verse reducido a partir de una serie de faltas no justificadas o días de baja por enfermedad común.

A partir de la primera "causa" la reducción será del 10% del importe establecido en las tablas. "Para cada causa siguiente se deducirá un 5%, por cada uno de ellos, adicional hasta un tope del 30% de deducción", se añade, precisándose que tras este porcentaje, "por cualquier otra causa dejarán de percibir el 100% del importe establecido en tablas".

Bien es cierto que no se considerarán "causa" las dos primeras bajas por enfermedad común; tampoco computan para esta escala de devengos los procesos con hospitalizaciones. En las bajas con intervenciones quirúrgicas, a petición del interesado, se pedirá informe al servicio médico de empresa para analizar si son de aplicación o no en esta escala por procesos de bajas. Tampoco computan para esta escala de devengos las bajas por enfermedad común igual o superior a 21 días consecutivos de baja, ni procesos derivados de Covid.

De acuerdo con los primeros datos manejados por Limasam, esta aplicación parece estar dando sus resultados, ya que se aprecia en los tres primeros meses del presente ejercicio una reducción considerable en el número de bajas respecto al mismo periodo del año pasado.

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