Nuevo crimen en la Costa del Sol, que vuelve a ser escenario de la muerte violenta de un hombre cuyo cadáver fue localizado ayer con varios disparos en el interior de un camión que podría ser de reparto en el centro de Torremolinos. La Policía Nacional tiene abierta una investigación para esclarecer las circunstancias en las que se produjeron los hechos. Las pesquisas apuntan a que se trataría de un asesinato que podría estar relacionado con el crimen organizado, según confirmaron distintas fuentes próximas al caso consultadas por este periódico. 

El cuerpo sin vida de la víctima, que presenta varias heridas por armas de fuego, se encontraba en la cabina de un camión amarillo aparcado en pleno centro del municipio. La hipótesis que se contempla es que el individuo pudo ser abordado por otra persona, y abrió fuego contra él. Testigos aseguraron a Efe que un hombre corpulento y joven que vestía ropa oscura y “de marca” pudo ser el autor del tiroteo. Según su testimonio, se cubría la cabeza con una capucha y abandonó el lugar del suceso “a paso ligero” por la plaza de la iglesia en dirección al centro de la ciudad, información que fue facilitada a la Policía.

La víctima, a tenor de las declaraciones de un vecino que lo conocía, es de origen marroquí y residía en Valencia, aunque se desplazaba con frecuencia a Málaga para desarrollar su actividad profesional, ya que se dedicaba a la venta ambulante.

El hallazgo se produjo poco antes de las 9 de la mañana. Fue la Policía Local del municipio la que informó de lo ocurrido a la Policía Nacional, que se ocupó entonces de la investigación del caso. Un amplio dispositivo de agentes trabajaba ayer en el lugar para aclarar las circunstancias de lo ocurrido. Varios testigos dieron aviso a la Policía. Hasta la zona se desplazaron numerosas unidades del Cuerpo Nacional de Policía, en concreto agentes de la Policía Científica y de la Policía Judicial, que inspeccionaron la plaza y sus inmediaciones y acordonaron la zona para proceder el levantamiento del cadáver.

Las primeras pesquisas derivaron en que la Unidad de Droga y Crimen Organizado (Udyco) de la Policía Nacional se haya hecho cargo de la investigación del crimen. Horas antes de recibir el aviso, varios vecinos habían escuchado ruido similar al de distintas detonaciones. El vehículo en el que fue encontrado el cadáver, según testigos consultados, no había sido antes visto por las inmediaciones. De ahí que los investigadores crean que el fallecido no era vecino de la zona.

El hombre fue encontrado sin vida en el interior de un camión de un llamativo color amarillo y estacionado en la plaza del Buen Consejo, frente a la Casa de la Juventud y el restaurante Maruja Limón. El despliegue policial generó cierto revuelo entre los allí presentes. La autopsia que se le practique en el Instituto de Medicina Legal (IML) permitirá confirmar la causa exacta de la muerte y contribuirá a conocer cómo se produjo.