Moción de censura: Amenaza en el ecuador del mandato

Los nuevos tiempos en política invitan al consenso, a los acuerdos y a los pactos, una vez que lo partidos han visto alejarse las tan ansiadas mayorías absolutas. Es una máxima en la que coinciden todos los actores, dentro y fuera de provincia, como resultado de la irrupción en el escenario político de las nuevas fuerzas. Pero no por ello se hace más estable un mandato con mayoría simple, a pesar de los pactos, con la sombra de una moción de censura planeando durante cuatro largos años. Cuando aún quedan tres meses para el ecuador del mandato, la provincia acumula ya siete mociones de censura presentadas. Cinco de ellas prosperaron, procurando cambios en las alcaldías de Ronda, Manilva, Pizarra, Cuevas del Becerro y Arenas. La de Alhaurín el Grande, presentada en enero, corrió una suerte diferente y tendrán que ser los tribunales los que arrojen luz sobre su legalidad. Para la de Frigiliana, presentada ayer, habrá que esperar hasta su debate. Al igual que para la siguiente, que podría ser en Nerja.

En las elecciones de mayo de 2015 consiguieron mayoría absoluta 73 de los 103 municipios de la provincia. El PSOE la ostenta en 35 localidades, y el PP en 23, entre las que se encuentran importantes feudos como Antequera, Fuengirola o Estepona. Mientras que Izquierda Unida la alberga en 9 y el resto están en manos de formaciones locales independientes. En los 30 municipios restantes es donde la inestabilidad planea desde el día siguiente de los comicios. La pérdida de la confianza en el equipo de gobierno, la falta de transparencia o la paralización del municipio son algunos de los motivos esgrimidos para sacar adelante una moción de censura. La posibilidad aún está vigente en más de una veintena de municipios hasta que en 2019 se convoquen nuevas elecciones; con importantes plazas como Torremolinos, Benalmádena y Marbella, con alcaldes socialistas en minoría.

Los primeros en hacer efectiva esta posibilidad fueron IU y Más Pueblo en Cuevas del Becerro, que con 3 y 2 concejales, respectivamente, consiguieron mandar a la oposición al PSOE (4 ediles). Fue en enero del año pasado cuando desbancaron al alcalde socialista Joaquín Esquinas. Como nuevo regidor, Cristóbal González (Más Pueblo), precisamente del partido con menos concejales.

También en los primeros meses de 2016 llegó el cambio a Pizarra. Tras los comicios locales, tanto PSOE como PP obtuvieron 5 concejales, por los 3 de IU. En un tablero de izquierdas, la lógica imperó con un pacto entre socialistas y la formación de izquierdas, con el que fue nombrada alcaldesa Ana Berlanga (PSOE). Pero el matrimonio duró apenas ocho meses, el PP y dos concejales de IU (el tercero se abstuvo) se aliaron para apoyar una moción que colocó en la Alcaldía al popular Félix Lozano.

En marzo del año pasado, la socialista Teresa Valdenebro le arrebató la Alcaldía a la popular María Paz Fernández gracias a una moción de censura entre PSOE, Partido Andalucista e IU. Entre todos suman 11 concejales, por los 7 del PP. Ocho meses duró el mandato del PP en minoría en la Ciudad del Tajo, después de un mandato anterior en el que se había conseguido la estabilidad gracias al apoyo del PA. Ahora los populares están en la bancada de la oposición.

Mario Jiménez, representante de Compromiso Manilva, se hizo el pasado noviembre con la vara de mando del municipio de Manilva tras prosperar la moción de censura presentada por su partido e IU. El socialista Diego José Jiménez había conseguido en las elecciones de 2015 recuperar la Alcaldía de la localidad después de 28 años y convertir al PSOE en el partido más votado en las elecciones (5 concejales). Una mayoría simple para la que necesitó contar con el apoyo de IU (4 concejales) para gobernar. Sin embargo, su pacto duró poco más de un año, hasta que la formación de izquierdas se alió con Compromiso Manilva (5 concejales).

El portavoz de Izquierda Unida en Arenas, Francisco Laureano Martín, tomó el pasado septiembre el relevo de la Alcaldía de manos del popular Manuel Ríos; todo ello gracias a la moción de censura presentada conjuntamente con el PSOE. Los resultados electorales de mayo de 2015 dieron tres concejales a cada uno de estos partidos, con una diferencia de 15 votos entre los populares, que acabaron siendo la lista más votada, e Izquierda Unida.

El Alhaurín el Grande hizo falta que todos los concejales de la oposición se unieran para intentar arrebatar la Alcaldía a Toñi Ledesma (Por Alhaurín). Con el partido creado por el ex alcalde del PP Juan Martín Serón, su equipo de gobierno se quedó a un solo concejal de la mayoría absoluta (10 ediles), precisamente el que consiguieron los populares. Para garantizar la estabilidad Martín Serón se retiró hace un año, con el compromiso de que el PP dejaría gobernar a Ledesma hasta final de mandato. Pero no contaban los populares con que su edil no atendería a las imposiciones de su partido y acabaría apoyando una moción de censura. Hasta el momento ha sido la más polémica y serán los tribunales los que tendrán que pronunciarse sobre su viabilidad. Un informe de la secretaria indicaba que no se daban las condiciones para que la moción prosperara, al quedar invalidado el voto de la concejal popular -el partido la había expulsado-. Por lo que en el caótico pleno en el que debía debatirse, no llegó a prosperar.

Además, en municipios como Mijas también se han producido cambios sin necesidad de moción de censura. De un gobierno entre C's y PP se ha pasado a otro de la formación naranja junto con los socialistas