Las falta de precipitacione tiene en alerta a todos los regantes de Málaga. Los embalses al 37,15% de su capacidad y que no ha llovido lo necesario estos últimos meses hacen que estos intuyan que habrá restricciones similares a las vividas en el último año hidrológico. Este jueves la Asociación de Regantes de la Provincia de Málaga (Aprema) y representantes de diferentes comunidades de regantes de la zona del Valle del Guadalhorce se han reunido con el delegado de Agricultura, Fernando Fernández Tapia, y representantes de la Diputación de Málaga para hablar sobre el agua que tendrán para el riego de este verano y también sobre el corredor verde.

En cuanto al riego, los regantes aseguran que debido a la actual situación de los embalses, les han comunicado que van a tener una restricción del 25% del caudal. Hasta ahora les han correspondido unos 40 hectómetros cúbicos por año hidrológico, pero al no haber llovido y que los los embalses del Conde del Guadalhorce, el del Guadalhorce y el de Guadalteba se encuentran al 30,56%, 35,07% y 53,24%, respectivamente, se les ha reducido el agua. Según estimaciones de los regantes se quedarían con 30 hectómetros, aunque prevén que finalmente serán menos debido a la pérdida de agua por evaporación, sustracción o averías.

Asimismo, remarcan que ya han utilizado cuatro hectómetros en el comienzo del año hidrológico. Por tanto, disponen de 26 hectómetros a repartir desde el 17 de abril, que comenzarán con el riego de verano, hasta el 31 de septiembre. Al distribuir el agua han decidido emplear dos hectómetros en abril; tres en mayo; cuatro en junio; siete en agosto y cuatro en septiembre.

En este sentido, las comunidades de regantes inciden en que no están de acuerdo con las restricciones ni con el trato recibido. Asimismo, remarcan que “siempre es la agricultura la que sufre las restricciones”, puesto que según les han indicado las restricciones de agua para el sector servicio serán de un 5%.

Corredor Verde del Guadalhorce

Por otro lado, en esta reunión también han dialogado sobre el Corredor Verde del Guadalhorce. En este punto, los regantes señalan que han puesto sobre la mesa algunas cuestiones sobre esta nueva construcción. Han hablado sobre que cabe la posibilidad de que les roben productos o si tienen que hacer diferentes labores agrícolas si está ese corredor podría ser perjudicial para los transeúntes. Por lo que están en “desacuerdo con el trazado de algunos tramos que se van a realizar en zona de servidumbre de dominio público hidráulico inundable y donde no existe un deslinde del río”.