El presidente del Parque Tecnológico de Andalucía (PTA), José Luis Marcos, señalaba a finales de marzo, en la presentación oficial de los datos de la tecnópolis correspondientes a 2008, que "a pesar de la situación delicada en la que estamos, podemos decir que el PTA es casi un oasis en la crisis". Unos meses después, haciendo balance del primer semestre, posiblemente esa afirmación fue demasiado optimista aunque, en líneas generales, se puede afirmar que el motor tecnológico de la provincia y uno de los principales de la comunidad autónoma está manteniendo el tipo. Felipe Romera, director general del PTA, explica a este diario que "el número de empresas se ha equilibrado. Tenemos en estos momentos 510, una más que a finales de 2008, por lo que nos encontramos en una situación estable dentro de la complejidad".

Hace unos meses se estimaba que el sector tecnológico iba a ser uno de los menos afectados por la crisis económica aunque la falta de financiación bancaria está acabando por engullir a todo tipo de empresas, independientemente de su sector. Este aspecto, lógicamente, ha cambiado la tendencia de crecimiento neto de empresas que ha experimentado el parque en los últimos años. Romera subraya que "el pasado año moría una empresa y nacían dos y, actualmente, la proporción es de dos a dos". No obstante, el director de la tecnópolis asegura que su previsión inicial "era bastante más negativa ya que pensaba que podíamos perder el 20% de las empresas y, de momento, estamos aguantando".

Lo que sí va a disminuir, y bastante, en el presente ejercicio es la facturación agregada de las empresas del parque. El PTA facturó, en su conjunto, más de 1.500 millones de euros el pasado año impulsados por Isofotón, que representó algo menos de un tercio de ese importe. Sin embargo, en el presente ejercicio, Isofotón está reduciendo drásticamente su producción ante la falta de clientes por la crisis financiera, llegando incluso a cerrar su fábrica malagueña durante días y presentar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo para toda la plantilla que estará vigente hasta abril de 2010. Se cumple así la maldición del líder del PTA, ya que las dos últimas empresas que han sido la joya de la corona de la tecnópolis, Vitelcom e Isofotón, han atravesado posteriormente malos momentos, la primera desapareció y la segunda está en plena incertidumbre.

Romera reconoce que las empresas "están mal y no sabemos qué es lo que va a pasar en la segunda parte del año", señalando incluso que "puede haber ajustes de empleo aunque no creo que sean importantes". El director del parque asegura que "no estamos en una situación para tirar cohetes pero estamos aguantando a pesar de la crisis" y hace hincapié en que "tendremos que ver los resultados mes a mes pero no creo que estamos hablando de una debacle como en otros sectores".

Mientras se sortean como se pueden los coletazos de la crisis, el PTA sigue inmerso en su proceso de ampliación. Romera confía en que se finalice en agosto el proyecto de parcelación de los 336.000 metros cuadrados que se van a poner en carga en una primera fase y que serán urbanizados por Vera con el objetivo de poder empezar a vender parcelas en septiembre.