El Puerto de Málaga quiere seguir incrementando sus números en el tráfico de cruceros en los próximos años. Así, para el ejercicio 2017 se pretende alcanzar los 300 buques de pasajeros recibidos y que se dé un salto en operaciones en base. Así lo explicó el presidente de la Autoridad Portuaria, Paulino Plata, quien recordó las 26 operaciones en base de la naviera Thomson de mayo a octubre, o las 19 de Pullmantur en estos momentos. "Este año representarán el 20% del total", expuso. En 2016, el recinto portuario prevé cerrar con algo más de 450.000 cruceristas y 254 barcos atracados en las instalaciones.

Así, Plata confió en que en 2017 los tráficos se incrementen aún más. "Hemos dado un salto notable en operaciones como puerto base", dijo, al tiempo que señaló que 2017 está prácticamente cerrado, trabajándose en ahora en la segunda mitad de 2018, con buenas previsiones también para Málaga, fundamentalmente en operaciones en base. Ello implica que los cruceristas pernocten en la ciudad antes o después de su viaje.

Según Plata, aunque es "anticipar mucho" y hay que esperar, el mundo del crucero "crece de manera permanente, incluso durante la crisis económica lo ha hecho". También explicó que la irrupción del mercado asiático ha provocado que haya compañías que han desplazado sus buques hacia allá; aunque existen en estos momentos "más de 50 barcos en astilleros y todos los años se ponen a flote y en servicio nuevos y de gran tamaño". Plata trasladó su malestar por las diferencias entre las tasas que cobran unos puertos y otros, lo que provoca una competencia "desleal".