Riesgo de desprendimiento del techo en una zona del Materno
El hospital dice que la obra de reparación ya está adjudicada y que se acabará en una semana
CSIF alertó ayer del riesgo de desprendimiento de parte del techo que existe en una zona del sótano del Materno donde hay un grupo electrógeno. Según el sindicato, el peligro no es solo para los empleados que trabajan en ese área sino incluso para los pacientes porque ese aparato es el que debe abastecer, ante un potencial corte de luz, a "UCI, urgencias e incubadoras".
CSIF asegura: "Si el Materno se quedara momentáneamente sin suministro eléctrico, no podría hacer uso del grupo electrógeno ya que se multiplicaría el riesgo de desprendimientos. Bajo este supuesto, de caer algunos de los bloques sobre el motor, gran parte del hospital se quedaría sin abastecimiento eléctrico".
El hospital en cambio negó esta denuncia porque indicó que el centro sanitario cuenta con tres grupos electrógenos. "El suministro eléctrico a las instalaciones críticas siempre está garantizado", aseguró una portavoz.
El Materno también replicó que el proyecto de obra ya está hecho, que los trabajos se han adjudicado y que la reparación estará concluida en una semana.
CSIF denunció que el pasado 30 de mayo se desprendió parte del techo de la sala y que no fue la primera vez que se producía un incidente de ese tipo. Desde entonces, según indica el sindicato, "el grupo electrógeno ha quedado bloqueado ante el miedo de que las propias vibraciones de la máquina provoquen más desprendimientos en la sala".
La situación ya fue notificada hace alrededor de un año por los trabajadores al comité de seguridad y salud del Carlos Haya, hospital del que depende el Materno. Ahora ha sido denunciada también por CSIF, que no descarta llevar su queja ante la Inspección de Trabajo si no se le pone remedio.
A principios de este año, UGT denunció ante la Administración laboral desprendimientos del techo en otra parte del hospital por si constituían una vulneración de las normas de prevención de riesgos laborales. La Inspección de Trabajo aún no se ha pronunciado sobre esa queja. Aquella denuncia se refería a desprendimientos del forjado del sótano, en la zona donde se archivan las historias clínicas.
UGT recordó ayer que además, hay una galería que comunica la parte ubicada debajo de las Urgencias de maternidad con la central térmica del edificio que incluso está apuntalada.
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