Un juzgado de Málaga ha condenado al Servicio Andaluz de Salud (SAS) a indemnizar con 45.000 euros a una paciente que sufrió una fractura de fémur tras tomar durante doce años un medicamento para endurecer los huesos sin control ni seguimiento alguno.

El SAS ha sido condenado por negligencia médica, después de que la mujer, de 59 años, estuviera tomando un fármaco con ácido alendrónico durante más de diez años, lo que provocó que la paciente se rompiera el fémur con solo darse un golpe en la punta del pie.

La mujer, representada por el abogado Damián Vázquez, de la asociación 'El Defensor del Paciente', comenzó a tomar dicho medicamento, indicado para el tratamiento de la osteoporosis, en mayo de 2004, y así continuó haciéndolo de forma ininterrumpida y sin supervisión médica hasta abril de 2016. Fue entonces cuando la mujer sufrió un tropiezo y se dio un golpe en el dedo del pie derecho. Ni siquiera llegó a caerse, pero tuvo que acudir al servicio de urgencias del Hospital Costa del Sol, donde le diagnosticaron fractura de fémur.

Los médicos que la visitaron decidieron suspenderle el tratamiento. La paciente tuvo que ser intervenida quirúrgicamente y el traumatólogo del hospital le informó de que ese hueso no se fracturaba fácilmente y que la causa de la misma había sido, según su criterio, la toma de ácido alendrónico durante un tiempo tan prolongado, que había endurecido los huesos en exceso.

Según el abogado, esa situación ha provocado secuelas y bajas laborales a la paciente y perjuicios para su calidad de vida, por la fractura y necesidad de operación quirúrgica, ya que un tratamiento con ácido alendrónico no debe extenderse por más de 3-5 años y sin que consten unos controles y supervisión adecuados.