Málaga

Accenture, 25 años de la mano del PTA en Málaga

Toni de la Prieta y Nuria Iglesias posan posando con el galardón otorgado a Accenture.

Toni de la Prieta y Nuria Iglesias posan posando con el galardón otorgado a Accenture. / JAVIER ALBIÑANA (Málaga)

El idilio entre Accenture y Málaga comenzó hace ahora 25 años, en un PTA que ya había cumplido el lustro pero al que aún le quedaba un largo camino por recorrer para ser lo que es hoy; desde entonces, esta firma ha multiplicado en varias ocasiones su apuesta por la capital, sobre todo en los últimos tiempos, consagrando un crecimiento que corre paralelo al de su anfitrión, erigido en la actualidad en destino predilecto para todo tipo de teletrabajadores. 

Un fenómeno al que también ha contribuido Accenture, que cuenta con el galón de haber sido una de las primeras compañías tecnológicas en sumarse al Parque. "Empezamos en el platillo volante del PTA, nos convenció Felipe Romera", recordaba Toni de la Prieta, responsable del Centro Avanzado de Tecnología de Accenture en España y Portugal tras recoger, junto a la responsable de la oficina de Málaga del Centro Avanzado de Tecnología de Accenture en España, Nuria Iglesias, el Premio Malagueños de Hoy 2023 que la redacción de este periódico les otorga por su exitosa andadura en la ciudad. 

Aunque el verdadero aldabonazo para la firma en suelo local llegaría, contra todo pronóstico, a partir de la covid-19. "En 2020, con la situación pandémica, nos encierran a todos. Pero decidimos seguir apostando por el talento. Entonces éramos 600. Ahora somos 2.300".  En cualquier caso, el sueño es seguir creciendo sobre una base fuerte, como hasta la fecha, con un "100% del trabajo indefinido" y con el foco puesto en el talento femenino, donde a nivel global mantienen "el compromiso de la paridad laboral en 2025", algo que en Málaga está cerca, puesto que "ya hay un 48% de mujeres" en plantilla. 

Muchos cambios surgirían desde los inicios, algunos a corto y medio plazo, muestra del designio de los tiempos; aunque la mayoría resultaron ser con vistas al futuro, como la implementación de un modus operandi innovador que no ha dejado de crecer hasta incluir los procesos más punteros. Mención aparte requiere la modificación del concepto Total Enterprise Reinvention que viene a señalar cuatro pilares: la búsqueda de nuevas vías de crecimiento, la realización de operaciones eficientes, la implementación de un núcleo digital y, claro, la focalización en las personas. 

Logros que, en conjunto, resultan todavía más impactantes si se echa la vista atrás, toda vez que cuando Accenture empezó a desarrollarse en el PTA sus empleados realizaban un trabajo mecánico y centrado en la codificación. Su modelo era una cadena de montaje: una factoría. Pero el objetivo era ambicioso: querían hacer una unidad de negocio puntera en España. Y lo consiguieron. Pasaron de la mera codificación al diseño del producto final. Todo, en medio de un proceso de adaptación continua a los cambios que se producen en el mundo digital, aspecto que llegaron a dominar y que les llevó a convertirse también en un referente a nivel europeo. 

De esta esta manera, en la actualidad, el Centro de Tecnología Avanzada de Málaga (que fue, además, el segundo en instalarse en el país, tras la apertura del de Madrid en 1992) presume de la puesta en marcha de recursos como la Inteligencia Artificial, que han optimizado para apoyar a los empleados en las tareas más repetitivas, consiguiendo niveles de automatización que años atrás hubieran sido difíciles de imaginar.

Para ello, recuerdan fuentes de la compañía, desde Málaga aportaron una versión propia del famoso Chat GPT, alimentada y nutrida con información verificada que el usuario puede añadir subiendo sus propios documentos. También ofrece la posibilidad de adaptar el Look and Feel a la marca corporativa. Este proyecto recibe el nombre de AlejandrIA y está dando la vuelta al mundo para ser usado tanto a nivel interno como por los clientes.

En paralelo corre el aprovechamiento de la Data, una tecnología que es responsable de grandes iniciativas a nivel nacional sobre digitalización que han partido de esta sede; fundamentalmente, con destino a las instituciones públicas, que han buscado la experiencia de este gigante tecnológico para adaptar sus servicios con precisión al imperio del dato. No obstante, no ha resultado el público el único sector beneficiado, ya que atienden a gran cantidad de industrias.

En este punto cabe recordar la importancia de la ciberseguridad, un apartado a todas luces pujante en el ecosistema digital de hoy día, y que en el caso de la sede en Málaga manejan a través de un Centro de Operaciones de Seguridad, desde donde se dirigen y monitorean todas las acciones de ciberseguridad al pie del cañón las 24 horas del día, los siete días de la semana con el prístino objetivo de permanecer siempre vigilantes y atender las vulnerabilidades de los clientes. 

Aunque desde Accenture desvelan que estas tres destacadas áreas de trabajo no están completas sin una cuarta, que a fin de cuentas es la que hace posible la marcha en todas las empresas, y que no es otra que las personas; pero, más específicamente, la ciudadanía malagueña, colectivo con el que existe un "compromiso adquirido". 

Aquí, destacan, desempeñan un papel fundamental las fuentes de talento. Un 50% de sus empleados tiene estudios universitarios, un 31% proviene de la FP y un 19% de otras fuentes como programas de segundas oportunidades con los que colaboran con entidades como la Asociación Arrabal, la Cruz Roja o el Secretariado Gitano, o instituciones educativas como Málaga42, ISDI o ESIC.

Además, "uno de los proyectos de los que nos sentimos más orgullosos" es el primer FP in company, una modalidad "única y pionera" en la que los alumnos reciben sus clases dentro de las instalaciones de la propia empresa, compaginando el día a día con profesionales. De esta manera, la formación y el trabajo se hace literalmente dando un paso, y a veces ni eso, porque desde el primer día teórico ya se sientan codo con codo con los empleados.

La primera promoción, recuerdan, "tuvo prácticamente un 100% de empleabilidad" y en la actualidad "se está cursando la segunda promoción con lista de espera". La formación en sí consta de 600 horas lectivas que se reparten en un periodo de 400 impartidas por profesores del centro educativo y 200 impartidas por profesionales de Accenture a través de prácticas.

Asimismo, Accenture mantiene alianzas con más de 30 centros FPs en Málaga y 10 acuerdos con universidades de Andalucía. Como dato, el año pasado tuvieron a 561 estudiantes de FP en prácticas. Pero su impulso a la educación no para aquí: colaboran con la Junta de Andalucia para apoyar la FP, hacen proyectos para actualizar los currículos educativos del SEPE, trabajan con la Universidad de Málaga mediante la Cátedra Hedy Lamarr e introduciendo la ciberseguridad en la formación universitaria, y emplean más de 170 horas a actualizar el profesorado FP en las últimas tendencias tecnológicas. Por no hablar, de masterclass o campus de verano, entre otros, con los que suman más de 40 eventos de apoyo al talento. 

En estos 25 años de Accenture en Málaga, reconocen, han logrado  “construir un entorno de trabajo atractivo para nuestras personas, marcado por nuestro compromiso y la forma en que abordamos los desafíos, resultando en un impacto positivo en la reinvención y transformación de nuestros clientes”. 

Como recompensa, este año han recogido ya cuatro premios: por su colaboración con el ecosistema innovador del Málaga TechPark, el Premio de Educación Ciudad de Málaga por el Ayuntamiento, el Premio por su colaboración del Centro Público Integrado de Formación Profesional y Premio Malagueños de Hoy 2023 del periódico Málaga Hoy.

A Toni de la Prieta le gusta decir que “somos el músculo de España y Portugal ”. Y también que "es un gran privilegio que podamos apoyar la reinvención desde Málaga". 

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