Alma Cruceros cesa definitivamente su actividad tras el embargo de su único barco y no descarta acciones legales

Alma Cruceros ha cesado definitivamente su actividad como naviera después de la rescisión del contrato de fletamento por parte de la propiedad de su único buque, el Ocean Victory, que debutó en un viaje inaugural el pasado 18 de abril entre Málaga y Las Palmas.

Tal y como ha explicado en un comunicado oficial, la compañía ha calificado la anulación de "unilateral e injustificada", lo que ha "imposibilitado continuar con las soluciones que se estaban explorando para mantener el proyecto operativo".

Desde la empresa han detallado que se reservan el derecho de iniciar las acciones legales oportunas con el fin de "resarcirse" de los perjuicios ocasionados por "decisiones ajenas" que "han dañado gravemente a clientes, proveedores y al propio proyecto".

Además, ha criticado que los propietarios del barco han retirado la nave con destino a aguas gibraltareñas de "forma sorpresiva", llevándose a bordo "todos los bienes y equipamientos pertenecientes a Alma Cruceros".

Previamente, la compañía ha asegurado que se había visto obligada a suspender temporalmente su operativa al no poder garantizar los niveles de calidad y servicio comprometidos, señalando que la causa principal fue el incumplimiento del proveedor hotelero y de catering, cuya falta de respuesta operativa imposibilitó ofrecer la experiencia prevista a los pasajeros.

Actualmente, Alma Cruceros está tramitando todas las reclamaciones de clientes y proveedores a través del correo electrónico como canal único habilitado para atender estas gestiones. También está trabajando con los seguros contratados y con el asesoramiento legal correspondiente para dar respuesta ordenada a todos los afectados.

Finalmente, la compañía ha querido agradecer la confianza de todos los que formaron parte del proyecto: agencias, instituciones, medios, clientes y colaboradores. Al mismo tiempo, ha pedido "comprensión y respeto" mientras trabaja con "máxima responsabilidad" en este proceso.

Alma Cruceros nació el pasado año y se anunciaba como la "primera naviera de cruceros de lujo del país, que tendrá base en Málaga y ofrecerá viajes exclusivos pensados para la comunidad hispanohablante". Su barco boutique, el Ocean Victory, que por entonces realizaba expediciones en la Antártida y sur de Argentina, regresaba a España por un período inicial de diez años durante las temporadas de verano (de abril a octubre), aunque el objetivo era incorporar nuevos barcos en el futuro, según el socio fundador y presidente de Alma Cruceros, el empresario malagueño Elisardo Sánchez.