Entre 100 y 200 vehículos de las autoescuelas malagueñas -según la Subdelegación del Gobierno y los centros de formación- se volvieron a manifestar ayer en la capital de la provincia para pedir al Gobierno y la Dirección General de Tráfico (DGT) una solución inmediata a la huelga de examinadores.

La protesta comenzó a las 09.30 horas en el recinto ferial y terminó sobre las 13.00 horas en la Jefatura Provincial de Tráfico, donde se concentró un grupo de los participantes.

En general la marcha se produjo sin incidentes, según fuentes de la Policía Local, salvo por algunos atascos en la Avenida Juan XXIII y un golpe de un coche que salía de un aparcamiento a otro de las autoescuelas, señalaron responsables de los centros.

La huelga de los examinadores ha provocado ya despidos y que algunos negocios se planteen el cierre, debido a que solo hacen las pruebas para obtener el carnet de conducir menos de un 20% de los clientes, según explicó a Málaga Hoy Francisco Javier Otero, uno de los portavoces.

Por estos motivos exigen al Gobierno y la DGT que tengan en cuenta el problema, negocien con los examinadores y lleguen a un acuerdo, y si no esto no se consigue, que busquen una solución "real" a la cuestión.

La manifestación se produjo de igual forma que la d el miércoles de la semana pasada, que reunió en una caravana de unos 400 vehículos a diversas autoescuelas de la provincia; esta vez hubo menos participantes porque muchos centros de fuera de la capital no acudieron, precisó Otero.

Los examinadores iniciaron una huelga en julio para demandar al Estado un incremento salarial que justifican por la falta de personal que hay entre estos funcionarios. Por su parte, el Gobierno defendió que llevó a cabo medidas para paliar esta escasez, como la implantación de horas extra y trabajadores itinerantes.