"¿También afecta al AVE? Ay, madre mía": Viajeros tirados en la estación de tren de Málaga por el apagón

Usuarios se ven obligados a cancelar sus planes

Málaga, paralizada por el apagón: ni Metro, ni trenes, ni semáforos

Usuarios a las puertas de la estación María Zambrano.
Usuarios a las puertas de la estación María Zambrano. / FELIPE RODRÍGUEZ

"¿Pero al AVE también le afecta esto?". Sí, le respondía un policía a un señor que se acercaba a la estación María Zambrano. "Ay, madre mía", agregaba el otro. Enrique tenía un billete para viajar en tren hasta Córdoba a las 14:25. "Después de llegar a Córdoba tengo que desplazarme a mí municipio, no me han dado respuesta", dice. Ha sido uno de los cientos de personas que han desalojado en Vialia.

Cristian a las 16:00 salía para Barcelona. "He llegado pronto, sobre las 12:00, y a las 12:30 nos han desalojado", señala. Tiene pensado visitar a algunos familiares y de momento tendrá que esperar. Mientras tanto le presta una batería portátil para cargar el móvil a Ismael, él no tenía billete de tren pero se ha quedado sin batería. "Ahora a las 14:30 me recogen en Blablacar para ir a Estepona, menos mal que he encontrado a Cristian porque si no se me complicaba la cosa".

John por su parte viene de trabajar, tenía pensando tomar un tren para viajar a Torremolinos, donde vive. Trabaja de lunes a viernes como traductor en Málaga y se traslada todos los días en tren. "Menos mal que ya he acabado de trataba, pero a saber cuando vuelvo".

Otro tipo de conexiones también se han visto afectadas. La Policía Local está controlando el tráfico, toda vez que no hay semáforos, el Metro también ha paralizado sus trayectos, así como los trenes de Media y Larga Distancia. El aeropuerto sí está operando con normalidad gracias a los grupos electrógenos que funcionan cuando hay un problema de suministro. Esto garantiza que los sistemas críticos del aeródromo funcionen con normalidad.

Los comercios se encuentran sin luz ni internet (los servicios de telefonía están funcionando de manera irregular), por lo que en general la población se ha visto paralizada de sus tareas cotidianas. La mayor parte de los establecimientos no aceptan pagos con tarjeta, cuyo sistema funciona de forma igualmente irregular.

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