Expectación y quejas en el segundo día de la Comic-Con en Málaga
Cientos de personas esperan hasta hora y media para comer en los puestos de la convención en una jornada con Jared Leto, John Gaeta y Matt Fraction como protagonistas
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La segunda jornada de la Comic-Con en Málaga ha arrancado este viernes con colas iguales o más largas a partir de las 10:00. Cientos de personas han pasado ya por los distintos espacios en un segundo día con Jared Leto, John Gaeta y Matt Fraction como protagonistas. La expectación y las ganas han sido las mismas, pero algunos asistentes ya tienen un veredicto claro: la organización podría ser mejor en general. "Fuimos al Salón del Cómic de Barcelona hace 10 años. Allí podías asistir a los eventos, aquí lo único que hemos venido es a hacer cola", ha reconocido Juan junto a su mujer Ivana y su hija Noa en su primer día en la convención. Los tres han venido desde Algeciras para disfrutar de la cita prevista hasta este domingo.
A pesar de los prohibitivos precios de la comida, la zona Village ofrecía una decena de carpas enorme con sombra y decenas de bancos enormes donde las familias, jóvenes y niños podían descansar. Para Ivana, los cupos para las charlas y los talleres son "muy reducidos". "Debíamos reservar las plazas online en la web, pero las invitaciones volaron. Además, fíjate, es imposible caminar con tanta gente. Nos hemos subido a las camas elásticas y al globo aerostático. Ahí habremos estado como unos 20, 25, minutos hasta que hemos podido hacerlo", ha explicado. Como esta familia, María Martín también ha hecho cola en su primer día de la convención. "Las expectativas eran bastantes altas, pero estoy un poco decepcionada", ha reconocido la joven "un poco friki".
Esta bailarina y entrenadora personal granadina cree que las actividades y los talleres propuestos por la Comic-Con Málaga son "muy interesantes". Aunque "el espacio se queda muy reducido para toda la gente que hay. Esta mañana al llegar no hemos tenido problemas en otras actividades, pero es verdad que, por ejemplo, queríamos entrar ahora a un taller de dibujo y al ser tan pequeña la sala no hemos podido entrar. Ha sido imposible", ha contado algo apenada.
Estefanía Pérez ha volado desde Madrid para asistir al estreno de la versión española de la San Diego Comic-Con. "Había colas larguísimas para todo. Pienso en toda esa gente al sol con los niños. Ayer jueves por la mañana no podías entrar con agua. Al principio te dejaban con la botella vacía. Luego había dos fuentes de agua dentro y colas de 40 minutos para llenarla", ha explicado la madrileña de 32 años.
La actriz, residente en Canarias, opina que hay "poca previsión" ante la avalancha de 25.000 personas diarias que ha estimado la organización. "Iba con las expectativas muy altas y me pegué un batacazo. Mucha gente hizo cola al sol durante hora y media para comer perritos a 19 euros, un precio desorbitado. Mi pareja y yo salimos a comer fuera del recinto y acabamos en un restaurante peruano a 15 minutos. Luego a la tarde, estaba mejor el tema colas", ha reconocido. Pérez cree que lo de las botellas de agua es "para poner una reclamación". "Con el calor que hacía no paso ninguna desgracia. Menos mal", dice resoplando.
Entre lo más destacado para ella, los cosplayers, "algunos muy buenos", y los stands para comprar merchandising. Eso sí, no le parece "justos" los precios para hacerse una fotografía o conseguir un autógrafo de alguno de los actores. "Me hubiera gustado con Taz Skylar, Sanji en el live action de One Piece. Era una pasta. Ya me gasté dinero en al avión y 55 euros de entrada", ha contado.
Desde un Bowser gigantesco a la habitación de Andy en 'Toy Story'
A lo largo del viernes, miles de personas se dieron un buen paseo por la exhibitor hall. Desde un gigantesco Bowser, rival de Mario, de cuatro metros de altura construido con más de 663.000 ladrillos LEGO hasta réplicas del coche de Regreso al futuro, la moto de Tron Ares y la nave de Predator:Bandlands o la habitación de Andy en Toy Story.
Los asistentes también pueden competir en las divertidas carreras de coches de Mario Kart World, disfrutar de la destrucción, la exploración y las plataformas de Donkey Kong Bananza y probar el esperado Metroid Prime 4: Beyond antes de su lanzamiento el próximo 4 de diciembre.
En la tienda oficial de la Comic-Con Málaga destaca sobre todo un guantelete de Thanos por más de 21.000 euros de la joyería americana East Continental Gems. Su exclusividad reside en que sólo hay 200 como este yque al lucirlo uno se verá como el supervillano en Avengers: Infinity War.
Entre los aspectos positivos, han dicho varios asisentes a este periódico, ha sido el transporte público (la línea que opera desde el centro con una buena frecuencia), el parking y la zona de fuera para sentarse. "Creo que el Palacio se queda pequeño. Necesitan un espacio más grande aún. Sobre todo diría por las actividades extras. Porque al final si no vienes sólo a comprar, sino que quieres ver algo interesante, hacer algún taller, no puedes porque las salas son muy reducidas y tantísimo aforo no da para eso", ha resumido María Martín.
Los funkos desatan la locura
El fenómeno Funko ha vuelto a desatar la locura en el inicio de la segunda jornada de la Comic-Con, con cientos de personas que corrían desde la apertura de puertas para ponerse en cola e intentar hacerse con una de las 150 figuras exclusivas que se ponen a la venta cada día.
Las imágenes de largas colas que empiezan en el estand de Funko y dan la vuelta a media zona expositora se han repetido este viernes, con el añadido de que, ante los problemas que hubo ayer y que corrieron como la pólvora por las redes sociales, desde la apertura de puertas los fanáticos de estas figuras se han lanzado a la carrera. El objeto de deseo son las 150 figuras exclusivas que se ponen a la venta cada jornada, de cuatro modelos, de los que sólo hay 9.000 ejemplares a nivel mundial.
A pesar de las colas, los precios abusivos de la comida y objetos de los stands, miles de asistentes pasearon al sol su orgullo friki y demostraron que la cultura pop puede unir a personas de muchos países.
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