Y comieron perdices

CON el tam tam de las elecciones andaluzas a punto de sonar, el PSOE de Málaga intenta culminar sus deberes para que nada distraiga la atención del reto de ganar los comicios autonómicos. Así que en estos últimos días se afanan por cumplir el calendario que les obliga a tener cerradas las candidaturas en los municipios de Málaga antes del sábado 31. Lo cumplirán en las ciudades de más de 20.000 habitantes. En algunos pueblos, se retrasarán hasta febrero.

Pero ya se pueden narrar algunas historias curiosas y humanas, o incluso que parecen sacadas de un cuento. Por ejemplo en Fuengirola, el alcaldable socialista Javier García León llevará como número 2 a una joven invidente, Leonor Basallote Barrientos, trabajadora de la ONCE y estudiante de Educación Social. Pero también en esta candidatura figurará Ana Belén Ramos Terceros, una chica de 18 años, boliviana, que está en segundo de Bachillerato y James Waite, un camarero inglés de 26 años que trabaja en el restaurante de su familia. Mañana martes, la asamblea debe aprobar la propuesta.

Entre los nuevos candidatos socialistas a alcaldías, destaca Tatiana Fargallo. Lo suyo ha sido llegar y besar el santo. Esta mujer es actualmente concejal socialista del ayuntamiento valenciano de Torrent. Pero el pasado verano contrajo matrimonio con un mozo de Alameda y en mayo será ella la aspirante a conseguir las riendas del Ayuntamiento en el que también reside su marido.

En Colmenar, el PSOE ha decidido presentar a Pepe Martín, el juez de paz, como candidato a la Alcaldía en detrimento del actual regidor Pedro Fernández. Igual así se ahorra sobresaltos judiciales y políticos. En 2011, Izquierda Unida prefirió darle la Alcaldía al PP antes que a él. Y un año después, éste se la arrebató a los populares gracias a una moción de censura con los andalucistas.

Para Casabermeja, el PSOE ha pensado que lo mejor es un arquitecto. José María García Fernández sólo tiene 27 años. Y el candidato a la Alcaldía de Cuevas de San Marcos será Antonio Roda Moyano. Con 41 años, es hijo de emigrantes. Nació y vivió en Francia hasta los 15. Ahora es agricultor y con su mujer tiene un criadero de perdices. Al menos algo ya se puede anticipar para escribir el final de este cuento de candidatos del PSOE a la espera de la cosecha de votos en mayo. No se saben si los resultados serán felices, pero en el caso de Antonio Roda, eso no le impedirá seguir comiendo perdices.