Cuenta atrás para que el Palacio de la Tinta de Málaga reabra como un hotel cinco estrellas

En el número 20 del Paseo de Reding, se levanta desde 1908, imponente, el Palacio de la Tinta. Casa entonces de los Ferrocarriles Andaluces (que le dio el nombre por la cantidad de tinta que traían para sellar los billetes a mano), hasta 2019 ocupó unas oficinas de la Junta de Andalucía, cuando lo vendió por 21 millones de euros a Eurostars. Ahora empieza la cuenta atrás para que reabra como un hotel de cinco estrellas. Será el sexto de la ciudad.

La empresa hotelera espera abrirlo en un plazo estimado de tres meses. Con las obras ya muy avanzadas, ha elegido su marca Aúrea, para lo que será el futuro alojamiento. Esta marca sólo la usan para unos pocos hoteles elegidos, aquellos que se enmarcan en edificios especiales: conventos, palacios... En los que se respeta aún más si cabe el espíritu del edificio histórico y hace que cada uno, incluso cada habitación dentro de estos, sea especial. "No hay dos hoteles Aúrea iguales", ha afirmado Javier Carrasco, director de Área de Eurostars hoteles, durante una visita para la prensa al interior del edificio, aún en fase final de obras.

Entre los hoteles bajo el paraguas de Aúrea están el Washington Irving, ubicado en Granada, de los más antiguos de España y transformado hace unos años, y la Casa Palacio Sagasta, en Cádiz, que fue consulado británico y en la Guerra de la Independencia embajada donde se alojó el duque Wellington. En España son 10 en total, este será el número 11 de la compañía.

En la particularidad de este edificio es donde empieza, desde cero, el proyecto para rehabilitar y reconstruir el Palacio de la Tinta de manera que pueda alojar huéspedes en el edificio decimonónico y de estilo parisino que diseñó Julio Aublin Calas. Daniel Isern, el arquitecto elegido para la obra, ha respetado multitud de aspectos originales con los que ya contaba. Entre ellos, los más importantes son el ascensor que vertebra el espacio, el primero que se puso en Andalucía; las vidrieras, o la estructura de madera de la última planta.

El ascensor ha sido una de las cosas más importantes. "Ha sido lo más difícil, porque lo dieron de baja", ha señalado Isern. Por este motivo, respetaron la estrucutra y exponen en la planta baja (donde situarán el spa), el original, pero en el interior de este han montado un ascensor moderno. La vidriera, otro de los elementos principales, se ha recuperado. Además, ha servicio como inspiración para otros elementos en habitaciones o comedor, generando una línea narrativa en todo el hotel. El interiorismo, además, se ha inspirado en el atelier de Pablo Picasso, generando otra conexión más con la ciudad. Los techos alcanzan los 3,5 metros de altura, dando un carácter señorial, aunque también ha supuesto problemas, como encontrar mármoles acorde –que van de suelo a techo– en los baños.

"Queremos que no sea sólo un espacio para los turistas, también para la ciudadanía, que esté abierta a los malagueños", ha señalado Carrasco. En este abrirse a los malagueños juega un papel fundamental la última planta. En ella se ubiacará el restaurante, además de una terraza con vistas a la malagueta. En ella han respetado la estructura original de madera vista, y han vestido las paredes con cerámicas azules y rojas. La presidirá una gran barra central, cuadrada, que modulará la sala, diáfana, en lo que antes era un taller y, casi un palomar.

Tan importante es que la obra ha empezado desde este punto, y ahora se encuentra en el sótano, al contrario de lo común. El hotel está pensado para disfrutarse de arriba abajo, muestra de que la recepción será una discreta habitación a la entrada, lo que invita a tomar directamente el ascensor a la última planta, el espacio común. Esta también contará con piscina en su terraza de 150 metros cuadrados.

Una vez abra al público contará con con 141 habitaciones (de las cuales 9 son suietes y 7 junior suites) y espacios de ocio y descanso. Para ello, según anunciaron enero de 2024, se realiza una inversión de 30 millones, de los que 15,5 millones son de un préstamo reembolsable del Fondo de Desarrollo Urbano Sostenible gestionado por el Banco Europeo de Inversiones. Si se le suma el precio de compra, el total serían 51 millones de euros en total. Desde la compañía este martes no han confirmado datos de inversión.

Las primeras estimaciones de la compañía hablaban de que se crearán entre 70 y 100 trabajos fijos. En este sentido han indicado que "próximamente" iniciarán el periodo de contratación, esperando que se unan a él el mayor número de locales posible.