Los efectos del alga invasora en la Costa del Sol: Invasión de los bosques de posidonias de Mijas y pérdida de biodiversidad marina

La presencia del alga asiática en las costas, denominada Rugulopteryx okamurae, está generando problemas en los ecosistemas marinos, provocando una pérdida de la biodiversidad que se traduce en localidades como Mijas en la afectación a sus bosques de posidonias al ser invadidos y tapizados por este vegetal, por lo que el Ayuntamiento pide al Gobierno central adoptar medidas de protección.

Así se puso de manifiesto ayer en una reunión mantenida en el Hospital Real de la Misericordia de Marbella, donde participaron los alcaldes y representantes institucionales de los ayuntamientos de Marbella, Estepona, Fuengirola, Mijas, Torremolinos, Algeciras o Cádiz para poner sobre la mesa la problemática de la invasión.

La cita sirvió para poner común las demandas de los ayuntamientos al Gobierno central, principalmente relacionadas con la inversión destinada cada año para retirar el alga de las costas, pero también se ha hecho hincapié en la pérdida de biodiversidad marina que está generando en los ecosistemas de la Costa del Sol o del Campo de Gibraltar.

En el encuentro, la alcaldesa mijeña, Ana Mata, puso de relieve que la problemática que genera la presencia del alga asiática no se limita a la acción de los ayuntamientos a retirar el residuo que queda en la orilla, sino que en los casos de municipios malagueños como Mijas y Nerja “los bosques sumergidos de posidonias están siendo invadidos” por el vegetal marino.

“Existe un problema de biodiversidad que se está poniendo en tela de juicio, es decir, hay una omisión por parte del Ministerio de Transición Ecológica de no poner remedios a una problemática con la que no solamente llega como residuo a la costa sino que está afectando a la biodiversidad, que tiene que protegerse por parte del gobierno central”, resaltó.

Mata lamentó que, de momento, “no hay ningún protocolo ni ningún ámbito de actuación, sino dejar que pasen las cosas sin poner medidas ante una situación de catástrofe natural”, criticando “una omisión en algo que se está produciendo en la biodiversidad de nuestros mares y que el Gobierno no ha hecho nada”.

La munícipe cuestionó “qué pasa con esas posidonias que tenemos en dos puntos del litoral de Mijas, y que actualmente se están viendo perjudicadas por esta plaga”, incidiendo en que existe un problema de índole de limpieza y mantenimiento de las playas y medioambiental.

Playa de La Caleta de Cádiz

Por su parte, la delegada de Vivienda y Desarrollo Sostenible de Cádiz, Ana María Sanjuán, puso de de relieve que la invasión de Rugulopteryx okamurae supone una “emergencia medioambiental, social y económica”, destacando la pérdida de biodiversidad que está generando la presencia del alga en determinadas zonas del litoral gaditano.

De este modo, señaló que en la playa de La Caleta se está produciendo una “destrucción de la biodiversidad”, al adherirse el vegetal al sistema rocoso generando pérdida de especies como cangrejos, erizos, o algas autóctonas. A ello se suma la morfología de esta zona costera, que obliga a adaptarse en la recogida de residuos “a nivel logístico, de infraestructura y recursos y de servicios”.

“Cádiz es un referente de la Economía Azul a nivel sur de Europa y por la riqueza de la biodiversidad y nos encontramos ante una destrucción” de la misma, ha indicado Sanjuán, agregando la afectación a la economía en sectores como la pesca, la apicultura o la biotecnología, que pueden verse muy perjudicadas”.

“Necesitamos tener medidas muy concretas, hay un plan estatal del 2022 que no se ha concretado en medidas estratégicas”, ha lamentado Sanjuán, quien ha subrayado que “el Gobierno de España tiene que tomar medidas porque son sus competencias”.